De tu fortuna el azar,

Pues también sufro al dejar

Las riberas de tu río

Siento dejar tu bohío,

Silvestres flor de Virama,

Y aunque mi pecho te ama,

Tengo que ser ¡oh dolor!

Sordo a la voz del amor,

Porque la Patria me llama.”

Inicia la Jornada Cucalambeana, evento que reúne lo más representativo de la cultura popular campesina en Cuba, y con ella se rinde homenaje a Juan Cristóbal Nápoles Fajardo (El Cucalambé), uno de los más importante representantes de la décima cubana del siglo XIX, a la intelectual Haydée Santamaría Cuadrado y al 45 Aniversario del Sistema de Casas de Cultura.

A 194 años del natalicio del poeta, el próximo 1ro de julio, la Jornada Cucalambeana extiende sus festejos hasta el día 2 del propio mes, tomando como sede la Finca tunera "El Cornito", sitio donde vivió Juan Cristóbal con su esposa Rufina.

Así dice aquel valiente

Llora, suspira, se inclina,

Y a su preciosa Guarina,

Dio un beso en la tersa frente.

Beso de amor, beso ardiente,

Sublime, sonoro y blando.

Y ella con otro pagando

De su amante la terneza,

Alzó la negra cabeza

Y le dijo sollozando:

La fiesta campesina acoge diferentes eventos: la muestra de producciones agropecuarias y materiales que facilitan la labor en el campo; el Salón Nacional de paisaje y la décima mural, integrado por artistas aficionados provenientes de colectivos cultores de las artes visuales de las Casas de Cultura. Dejando para el arte literario, el Concurso Nacional “Cucalambé en décima”, además de jornadas académicas que inician con el Coloquio Iberoamericano de la Décima y el Verso Oral Improvisado. El arte culinario también ha reservado un espacio de forma permanente, y es que la elaboración de platos tradicionales y bebidas típicas, son expuestas y deleitadas por los que se acerquen al evento. Como protagonistas también están las familias que dedicadas a la artesanía, muestran su hacer y cómo logran transformar la fibra vegetal y la madera en objetos útiles, decorativos y jugueterías. De esta forma, la Jornada es además un espacio diseñado para el rescate de juegos y bailes tradicionales.

“ Vete, pues, noble cacique,

Vete, valiente señor,

Pues no quiero que mi amor

A tu Patria perjudique;

Mas deja que te suplique,

Como humilde esclava ahora,

Que si en vencer no demora

Tu valor, acá te vuelvas,

La cita es entonces con la preservación de las más genuinas expresiones de la cultura de la Isla. La contribución al fomento del movimiento cultural que surge en las zonas rurales, el desarrollo de las formas literarias, orales y musicales, (tonada, décima escrita y repentizada), así como el reconocimiento a dignos representantes de este arte y la cultura campesina, que han hecho aportes significativos.

Como uno de los evento de la cultura campesina en Cuba, La Jornada Cucalambeana arriba al 56 Aniversario y se consolida como el espacio artístico-cultural representativo de la cultura comunitaria cubana, que reúne cada año a los amantes del género para propiciar el intercambio de saberes sobre la décima y la tradición campesina.

Porque en estas verdes selvas

Guarina vive y te adora.”

¡Sí! Volveré, ¡indiana mía!”,

El indio le contestó,

Y otro beso le imprimió

El mismo, se ha convertido en un movimiento participativo que involucra a través de los llamados talleres de creación y apreciación a niños y adolescentes. Deleitando así a cada asistente, con la riqueza de la tradición cubana, por lo que se considera un evento de sólidos sellos identitarios heredados y trasmitidos de generación en generación.

La Cucalambeana contribuye de esta manera a estimular el trabajo de intelectuales, investigadores y académicos dedicados a salvaguardar la cultura campesina en el país. Por ello, el reconocimiento al cultor de la poesía popular, el cuento costumbrista, sonetos, letrillas, epigramas y romances. Al famoso por las obras El Cucarambó y Rumores del hórmigo, considerado un clásico de la lírica en la isla caribeña y al representante del siboneyismo y el criollismo en la poesía cubana.

Con dulce melancolía

De ella al punto se desvía.

Marcha en busca de su grey,

Y cedro, palma y jagüey

Repiten en la colina,

El triste adiós de Guarina,

El dulce beso de Hatuey.

" Hatuey y Guarina" EL CUCALAMBÉ