El emblemático Hurón Azul, espacio de referencia en La Habana para creadores e intelectuales en la sede de la UNEAC reabrió sus puertas al público este 3 de febrero con la participación de imprescindibles artistas de la cultura cubana.

El espectáculo de vuelta a la vida contó con nombres imprescindibles de la música cubana como Beatriz Márquez, Pancho Amat, Eduardo Sosa, Cesar López y Orlando Valle (Maraca) junto al grupo Afroamérica que dirige el bailarín, cantante y percusionista Justo Pelladito, defensor de la más auténtica rumba.

Desde que Nicolás Guillén sugirió llamar a este espacio como la casa que habitó en Arroyo Naranjo desde 1939 el gran pintor cubano Carlos Enriquez, el «Hurón» tiene vida propia, señala Pedro de la Hoz en un texto con el que la vicepresidenta de la UNEAC Magda Resik dio la bienvenida a los invitados de la noche.

La fisonomía del lugar ha cambiado, señala Pedro, cuando escudriña la forma en que se concibió el espacio que hoy se ha transformado, pero también ha ganado en categoría dentro de la programación de la UNEAC y se ha convertido en un punto de referencia cardinal en la vida cultural habanera.

Así sucedió en esta reapertura, como expresión de la voluntad de la organización en retomar luego de momentos difíciles y dolorosos provocados por la pandemia de Covid-19, pero que hoy comienzan a cambiar.

Después de un proceso de remozamiento y habilitación capital con el apoyo del Partido y el Gobierno de La Habana, el Fondo Cubano de Bienes Culturales, el Ministerio de Cultura y el colectivo de creadores y trabajadores de la UNEAC, lo más importante es volver a pasarla bien, que significa disfrutar del jazz, la trova, el bolero, la música tradicional y presentaciones infantiles y de libros, señala el texto de bienvenida.

La noche también fue propicia para recordar, como expresa Pedro de la Hoz a aquellos ángeles tutelares vinculados para siempre a la memoria del Hurón Azul, como el poeta Eloy machado (el ambia); los inefables cronistas Enrique Núñez Rodríguez y Eduardo Robreño; el poeta y musicólogo Helio Orovio y el inolvidable escritor y revolucionario Efigenio Ameijeiras.

El Hurón reanuda su ruta con la mirada puesta en todo cuanto acontecerá, de manera paulatina desde este momento, que es además salvaguardar y promover lo más auténtico de la música y la cultura popular cubana en relación con su entorno natural en la capital de Cuba.