“Sólo la unidad puede salvar la sobrevivencia de los pueblos de América Latina”.

Un amplio e interesante anecdotario sobre el legado del más grande Pensador político revolucionario de la segunda mitad del siglo XX y principios del actual, Fidel Castro Ruz,  distinguió el Aniversario 93 del Nacimiento de nuestro inolvidable Comandante en Jefe, durante una actividad efectuada en la sede habanera de la Asociación Cubana de las Naciones Unidas (ACNU).

Para su desarrollo y como principal invitado estuvo el reconocido diplomático Giraldo Mazola, quien representase durante décadas a la Mayor de las Antillas en varios puntos del planeta.

Al realizar la presentación del disertante Fermín Quiñones Sánchez, director de la ACNU, enfatizó en que este es un momento muy importante pues une a la comunidad de asociados y colaboradores de la ACNU, “por lo que hemos propuesto que el legado de Fidel en la política exterior cubana se mantenga vivo hoy más que nunca en su lucha contra el imperialismo y por la continuación del socialismo”.

Seguidamente fue presentado un material audiovisual expositivo de las distintas intervenciones, conferencias y entrevistas en medios de prensa nacionales e internacionales realizadas a Fidel, desde el triunfo revolucionario de Enero de 1959, además de un amplio destaque de sus visitas y participación en las diversas Cumbres Iberoamericanas (Harare, Durham, Brasil, entre otras), y en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Durante su disertación Mazola relató algunas anécdotas referidas a Fidel conocidas muy profundamente por él, y “que reflejan cualidades, preocupaciones, objetivos, sentido de la justicia y equidad”, además de informar que “en las calles 13 y Paseo, en El Vedado, en estos momentos se trabaja en una obra gigantesca, por su contenido y modernidad, que será el Centro Fidel Castro, destinado a la promoción del pensamiento y la obra de Fidel Castro, el desarrollo de las investigaciones del pueblo y en particular, de los jóvenes y niños interesados en la vida y la obra del Comandante en Jefe. En él se darán a conocer sus esfuerzos organizativos para llevar a cabo la lucha revolucionaria, sus años de combate en montañas y llanos, y su inconmensurable tarea de llegar a construir una Patria nueva, defenderla, así como hacer realidad la breve frase de Martí Patria es Humanidad, esencia de nuestra solidaridad e internacionalismo”

Puntualizó que el Centro realizará una labor extensionista y de las relaciones internacionales; establecerá vínculos con instituciones afines en el país, en específico, las Cátedras Fidel Castro creadas en universidades de Cuba y de otros países, “al igual que contará con una intensa programación político cultural, una editorial, un taller de imprenta y nueve salas expositivas. Actualmente, el Centro desea recibir testimonios personales o fotos relacionados con Fidel”.

El prestigioso Diplomático instó a todos los presentes, que tengan algún recuerdo del Comandante en Jefe conversaciones, fotos, tareas encomendadas, o documentos valorativos sobre cualquier rama del desarrollo económico, social o político de nuestro país, que contacte al equipo que lo organiza que son los compañeros Alvariño y René González Barrios. Asimismo, a dicha institución tendrán acceso cubanos y extranjeros.

A continuación, el nutrido auditorio allí reunido conformado por diplomáticos de antiguas y nuevas graduaciones; miembros individuales y colectivos de la ACNU;  profesores universitarios, escritores, artistas, investigadores y profesionales de diversas disciplinas, trajeron consigo memorables anécdotas personales junto a Fidel.

Finalmente, y entre aquellas numerosísimas e inolvidables entrevistas repletas de saberes, existe una presentada por la Televisora de los esposos Bravo (2000), la que (quizás) resume el pensamiento político y antiimperialista de Fidel, al afirmar: 

“Defendimos nuestras convicciones, defendimos nuestra independencia, y quisimos hacer justicia como rebeldes. Y si a David se le recuerda por qué luchó contra Goliat, a los cubanos que constituimos un  David  mucho más pequeño contra un Goliat mucho más grande, se nos tendrá que recordar tanto como se recuerda a David”.

En suma para Fidel y como epílogo para todos los revolucionarios de este continente: “Sólo la unidad puede salvar la sobrevivencia de los pueblos de América Latina”.