Desde el día 5 de junio, en centros de música de concierto de La Habana se ha ido gestando el ya conocido Encuentro de Jóvenes Pianistas, esta vez en su sexta edición. Encuentro este, que se caracteriza por traer a nuestro país a los pianistas más importantes del mundo con el fin de establecer una conexión de estos con la escuela cubana de piano.

Muchos fueron los multipremiados concertistas que se presentaron en la Basílica Menor de San Francisco de Asís, ya que fue esta la principal sede de conciertos. El pasado 11 de junio le dijimos adiós al festival y una vez más el Gabinete de Patrimonio Musical Esteban Salas nos invitó a un concierto con motivo de la clausura del mencionado evento. Los pianistas invitados a realizar tal tarea fueron Kirill Gerstein (Russia- EE. UU) y Katia Skanavi (Grecia).

Miriam Escudero, una de las principales gestoras del evento fue quien realizó el discurso de presentación, en el cual agradeció principalmente a Salomón Mikowsky y Eusebio Leal, fundadores del Encuentro; a cada pequeño apoyo que ha tenido el evento a lo largo de sus seis ediciones y presentó a todos los integrantes del Gabinete Esteban Salas quienes son los que desde las sombras priorizan cada mínimo detalle.

Ambos invitados dedicaron la velada al piano, intención que muestran al seleccionar su programa a interpretar. El concierto, es conocido como la obra escogida por los grandes compositores para mostrar y desarrollar las habilidades técnicas e interpretativas del instrumento y del intérprete. En este sentido las dos piezas a interpretar fueron el Conciertos no. 2 en fa menor op. 21 de Frederick Chopin por Katia Skanavi y el Concierto no. 3 en do menor op.37 por Kirill Gerstein; acompañados por la Orquesta del Lyceum de La Habana bajo la dirección de José Antonio Méndez.

Fue una magistral interpretación de ambos músicos, mostrando los más detallados matices y las mejores habilidades pianísticas. Asombraron al público presente con su manejo del repertorio interpretado y de las características estilísticas de cada compositor, así como de la conexión con la orquesta que los acompañaba, la cual fue capaz de responder a cada intención musical deseada. Así nos despedimos del VI Encuentro de Jóvenes Pianistas hasta su próxima edición.