En la tarde de hoy falleció en La Habana uno de los más grandes intelectuales de Cuba y América, Roberto Fernández Retamar, Presidente de la Casa de las Américas.

Fernández Retamar nació el 9 de junio de 1930. Poeta, ensayista y profesor universitario, es autor de decenas de libros de poesía y ensayo. Entre ellos se destaca Caliban, uno de los más importantes textos ensayísticos de la literatura en lengua española del siglo XX. Retamar fue colaborador de la revista Orígenes, y en 1965 comenzó a dirigir la revista CASA, labor que mantuvo de manera ininterrumpida hasta su fallecimiento. Fundó en 1977 y dirigió hasta 1986 el Centro de Estudios Martianos y su Anuario.

Se le otorgó el Premio Nacional de Literatura en 1989. Profesor de mérito de la Universidad de La Habana en 1995. Ha recibido otras condecoraciones y premios en Cuba y en el extranjero, entre ellos, el Premio Alba de las Letras 2008 y el Premio Internacional José Martí que otorga la Unesco. Se desempeñó como Presidente de la Casa de las Américas desde 1986 y fue miembro de la Academia Cubana de la Lengua, que también dirigió.

Roberto Fernández Retamar integró durante la lucha contra la dictadura de Batista el Movimiento de Resistencia Cívica y publicó en la prensa clandestina. En 1960 ocupó el cargo de consejero cultural en París.

Participó en numerosos eventos internacionales. Entre ellos, asistió como delegado de Cuba a la XI Conferencia General de la Unesco. En el primer Congreso Nacional de Escritores y Artistas de Cuba, en 1961, fue elegido secretario coordinador de la Uneac.

Entre 1998 y 2013 fue diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular y miembro del Consejo de Estado. Militaba en el Partido Comunista de Cuba.

De acuerdo con su voluntad y la de sus familiares, su cuerpo será cremado y sus cenizas lanzadas al mar en ceremonia íntima. Próximamente, la Casa de las Américas organizará un homenaje a su Presidente, el poeta Roberto Fernández Retamar.

Toda la trayectoria de Roberto Fernández Retamar ha sido la de un intelectual comprometido con su obra y con la obra mayor, la de la Revolución cubana y latinoamericana.

Lleguen nuestras más sentidas condolencias a sus familiares, amigos y compañeros. Ha pasado a la inmortalidad un grande de las letras, un hombre excepcional, un revolucionario ejemplar.