La Marimba femenina de Guatemala ofrecerá un concierto el 30 de mayo a las 11 de la mañana en la Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís, como homenaje por los 500 años de la Villa de San Cristóbal de La Habana, según declaró hoy a la prensa Héctor Iván Espinoza Farfán, embajador de esa República en Cuba.

El diplomático resaltó que la presentación tiene una significación especial porque la marimba, pieza hecha de láminas de madera afinadas dispuestas en forma de teclado, es el instrumento nacional del país centroamericano, y aunque tradicionalmente lo tocan los hombres, en esta ocasión estará ejecutado por mujeres.

Los himnos de ambas Repúblicas, la emblemática Guantanamera, así como también ritmos latinoamericanos integrarán el repertorio de la agrupación, que por vez primera se presenta en la mayor de Las Antillas, destacó.

El concierto, de entrada libre, contará con el auspicio del Ministerio de Cultura de Cuba, y la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, y estará interpretado por nueve personas, quienes tocan los dos teclados y los instrumentos de percusión acompañantes.

El embajador resaltó que para su país es un honor dedicar ese homenaje a La Habana, por los vínculos de amistad y las excelentes relaciones existentes entre Guatemala y Cuba, razón por la cual se suman desde la cultura a la trascendente celebración de los 500 años de la capital cubana.

La Marimba se presentará también en el Teatro José Jacinto Milanés, de Pinar del Río, el día 31 de mayo a las cuatro de la tarde, para que los pobladores de esa ciudad puedan disfrutar de la versátil agrupación.

La República de Guatemala ha contribuido de forma considerable con el desarrollo de ese instrumento musical tan ligado a la milenaria cultura Maya, y al cual le han añadido en las últimas décadas un doble teclado y cajas de resonancia.

El 16 de noviembre próximo se celebrará el medio milenio de la Villa de San Cristóbal, y con el objetivo de agasajar la ciudad se realiza desde hace varios meses un amplio programa cultural, constructivo y social en la capital cubana.

Por Maite Rizo Cedeño