Deliciosa tragedia es la obra "Maneras de usar el corazón por fuera" de Yerandy Fleites (Premio de dramaturgia Virgilio Piñera 2018) que cuenta en su haber  cerca de 10 textos teatrales y varios premios.

 "Maneras de usar …… llevada a escena por la agrupación teatral El Cuartel bajo la dirección artística de Alberto Saraín, se presenta en la Sala Teatro Llauradó durante todo el mes de marzo  en Circuito de la calle Línea, Vedado, La Habana, #Cuba.

Texto en el cual desde lo trágico se nos cuenta la historia de retorno a la isla del personaje  Palma, de eso va la el argumento inicial de Yerandis, el reencuentro de Palma  con su pasado. Para ello Fleites mueve los  del destino de cada personaje en un entramado dramatúrgico complejo.

Acompañan a Palma, Sergio, Alameda, Santizo, Al chino, José el mexicano, Renata la silenciosa y he dejado para el final un personaje especial el tiempo. 

El complejo universo que nos regala Fleites lo estructura a partir varios niveles temporales  en el  cual revista la dramaturgia de Carlos Felipe, expoliando a sus personajes desde la dimensión del teatro dentro del teatro y jugando con el efecto del distanciamiento rayando en lo performático.

De esta manera  coloca al espectador en múltiples puntos de giro entre lo real y lo teatral o lo teatral y lo real desde el mismo juego de lo real y lo teatral o de lo teatral y lo real de los actores-personajes.

Lo temporal provoca que los personajes y sus historias se muevan entre el tiempo presente, pasado y futuro, el tiempo real de la anécdota teatral y  el tiempo presente del espectador. El autor logra con maestría desde la fragmentación  moverse en los varios espacios temporales transitando de uno a otro de manera ágil, lo cual provoca un contraste entre los varios espacios temporales  y sus posibles lecturas.

El juego temporal a la par, permite que el autor desde el inicio y hasta el final del texto intrigue al público, con una cadena de sucesos de saltos en la estructura de las  peripecias,  hasta llegar al  fatídico desenlace.

Llegado este punto en la obra, el juego temporal hace de las suyas. ¿La muerte de Santizo, es la expiación de la culpa del personaje o del actor personaje?  O ¿de los varios niéveles temporales, léase entornos sociales,  en el que ha vivido el personaje  o el actor personaje  su tragedia personal para la cual no está preparado?

Tarea encomiable que tiene los actores y actrices que conforman el elenco, de dar vida a los personajes y a los  actores-personajes.

Giselle Sobrino transita por la cuerda de su Palma con soltura, Marcel Méndez da vida a Sergio desde la representación, Jorge Luis Cabo logra un chino con oficio. Yadira Gonzales y Luis Ángel León con Alameda y el Violinista, respectivamente,  salen airosos del lance. Pablo Castillo con su José y Adnaloy Pérez con Renata logran los matices exactos de sus personajes  para cada momento.

En el resto de los apartados, el diseño de vestuario y escenografía es de un realismo simplificado que permítela agilidad que la puesta necesita, solo un detalle, creo que existen elementos en la escena que no son necesarios. El diseño de luces de Marvin Yaqui apuntala la puesta y crea los momentos de atmosfera necesarios. La banda sonora se integra al juego temporal de la puesta en escena, conformando parte del efecto de distanciamiento del montaje y que le da el toque de los coros de las clásicas tragedias griegas.

Alberto Sarraín como responsable de la dirección artística logra una estética realista ortodoxa  de inicio a fin logrando que las 2 horas de espectáculo pasen inadvertidas.            

También es un desafío para el espectador dilucidar el texto y el montaje, especie de caja china o cubo de Rubik con tantas o posibles lecturas según el imaginario del público y su universo personal.

Deliciosa tragedia "Maneras de usar el corazón por fuera" para acariciar la mente del espectador por dentro.