El Buena Vista Social Club vuelve a hacer historia, esta vez en escenarios cubanos con sendos conciertos ofrecidos este fin de semana en el teatro Karl Marx a propósito de la Feria Internacional Cubadisco 2016.

La mítica agrupación de música tradicional cierra así dos décadas de trabajo caracterizadas por el éxito de sus presentaciones alrededor del mundo, una multipremiada discografía, y hasta una nominación al premio Oscar por el documental Buena Vista Social Club en el año 2000.

Lo del Karl Marx fue un cierre por todo lo alto, el Adiós Tour,  la última gira del “all star”, mostró una vez más las pasiones que despierta la música tradicional cubana cuando es interpretada por artistas de probada calidad y sentimientos por lo que hacen.

En esta ocasión, dirigida por el joven pianista Rolando Luna, la joven generación de cantantes inicio el recorrido por el amplísimo repertorio con el que le han dado la vuelta al mundo. Idania Valdés mostró fuerza y Carlos Calunga que es uno de los mejores soneros de Cuba. De sus voces los asistentes pudieron disfrutar de Bemba colorá, El rincón y Brusca Manigua, entre otros títulos, para luego dar paso a los “pesos pesados” del conjunto, que puso tope los conciertos con la entrada de La Diva Omara Portuondo y Eliades Ochoa.

El Buena Vista es un fenómeno, y no por trillada la etiqueta deja de ser verdad. La música tradicional cubana se vio oxigenada con su aparición en los escenarios, y aunque otros hoy siguen con paso firme su legado, el camino fue abierto por ellos.

Por desgracia la agrupación da su adiós definitivo, aunque sus integrantes se mantendrán en activo en proyectos personales o colectivos, siempre quedará el aquello de haberlos disfrutado más, sobre todo para el público nacional, que muy poco ha disfrutado de esa fama que disfruta el conjunto a nivel global.  

Sus discos nunca circularon en la Isla, ni en formato físico o digital, y fuera de sus contados conciertos en la capital no llegaron a otros escenarios del país donde con agradecimiento y respeto se les hubiera recibido.

En más de una ocasión los integrantes del Buena Vista, de los que una parte importante de sus fundadores ya no están, expresaron sus deseos de realizar una gira nacional, incluso se anunció para inicios de 2014.

Con el Adiós Tour parece terminar todo, aunque queda la buena música que defendieron durante tanto tiempo y la deuda sin saldar con su principal público: el cubano.