El Libro del Mes fue una de las novedades del Verano cultural, una propuesta del Instituto Cubano del Libro (ICL) que tuvo gran acogida por parte del público en general y de los artistas y escritores cubanos y que no terminará con el verano.

Esta acción se inscribe dentro del Programa Nacional de la Lectura que auspician entre otros los Ministerios de Educación y Cultura, el ICL, el Observatorio del Libro y la Lectura y la Biblioteca Nacional José Martí, con el objetivo de  estimular el contacto de los lectores, sobre todo de los más jóvenes, con obras trascendentales de la literatura universal.

De esta suerte fueron presentados en todas las provincias del país los volúmenes Ismaelillo, de José Martí (Pueblo y Educación); El Principito, del francés Antoine de Saint-Exupéry (Gente Nueva) y Un niño llamado Fidel Alejandro, de María Luisa García Moreno y Rafaela Valerino Romero (Verde Olivo), en los meses de junio, julio y agosto respectivamente.

En cada ocasión, los lectores abarrotaron los sitios donde se realizaron estas presentaciones literarias, y en la mayoría de las ocasiones se agotaron los ejemplares puestos a la venta.

Los organizadores de esta iniciativa reconocen como talón de Aquiles de la misma las limitadas tiradas en el caso de Ismaelillo y Un niño llamado Fidel Alejandro con 3 mil ejemplares, lo que motivó que se agotaran ambos títulos en el momento de la presentación; no ocurrió así con  El Principito, con una tirada de 5 mil.

Por esta razón las autoridades del ICL están previendo que se aumente la impresión para Canción antigua a Che Guevara, de Mirtha Aguirre; Breve Historia del Himno Nacional de Cuba, de Jesús Gómez Cairo; Corazón, de Edmundo de Amicis y Había una vez, selección de Herminio Almendro Ibáñez, que serán presentados, en ese orden, en los meses que restan de este año 2018.

Pero este talón de Aquiles existe solo en los libros impresos, no así en el caso de los formatos digitales, ya que cada uno de los volúmenes que integran este proyecto de estímulo a la lectura se promueve en los formatos e-book y APK, aplicación para teléfonos celulares; ambas alternativas están disponibles en los Joven Club de Computación y además en la plataforma Todo de Arte del Portal Cubarte. 

Según la dirección de los Joven Club de Computación, que han incluido estos títulos digitales en su opción La Mochila, se han efectuado desde el comienzo de esta experiencia en el país más de 300 visitas y descargas de El Principito, por ejemplo.

El sitio digital Cubaliteraria ha acompañado las presentaciones en La Habana, ciudad en la que se ha escogido para este fin la Calle de Madera del Centro Histórico, por su tradición, y han contabilizado entre Ismaelillo y El Principito más de 400 descargas.

No es suficiente aun, pero es una excelente idea que ha sido recibida con muy buena aceptación y que con inteligencia ha integrado la opción digital que es el formato de una parte de los niños y jóvenes cubanos, aunque no de todos los que merecen conocer los mejores pensadores del mundo e incorporar sus enseñanzas al proceso de desarrollo de sus personalidades.