Representativas del sostenido interés del Centro Provincial de Artes Plásticas y Diseño (CPAPD) por promover la obra de las más jóvenes generaciones, son las tres exposiciones que por estos días acuna en su sede, ubicada en la intersección de las calles Luz y Oficios, en La Habana Vieja.

Como si aludieran y, al mismo tiempo quisieran resguardarnos del intenso sol que castiga en la acera inmediata a la entrada de la Sala Polivalente, en ella nos esperan las sombrillas de Erick Varela Ravelo (La Habana, 1971), artista que no deja de sorprender desde su formación básicamente autodidacta.

En Conjuro de la sombrilla, tal es el título de la muestra, diez pinturas y dos esculturas recrean dichos objetos —portadores de diversos significados en otras culturas, más allá de su indudable carácter utilitario— siempre con un estilo que difiere, pero deja ver su deuda con el abstraccionismo geométrico que caracterizó el trabajo de este creador años atrás.

Una vez dentro de la que en el siglo XVII fuera la casa del Conde Barreto, encontramos de inmediato en la Sala Alternativa La Cuba de mi bisabuelo, exposición de Abigaíl Gómez, artista estadounidense de origen cubano, quien representa de forma abstracta en sus pinturas de pequeño formato detalles arquitectónicos de los hogares de la Isla y paisajes que descubrió en sus visitas a Pinar del Río y La Habana.

Destacan en estas obras las texturas logradas por el autor a través de varias capas de pinturas y hasta objetos por él hallados, durante esa búsqueda de sus raíces culturales que fue el ir al encuentro de los lugares en que vivió su bisabuelo, antes de emigrar.

En el primer nivel del CPAPD, la Sala Barreto exhibe por estos días la muestra titulada Persistencia, la cual constituye una amplia panorámica del quehacer de Víctor Cordero Salas (Holguín, 1981), el cual está marcado por una concurrencia de estilos y lenguajes.

Desde los comics e ilustraciones que ocupan el primer segmento de la exposición hasta los grandes lienzos que ocupan el resto de la galería, es apreciable la incorporación que hace el artista del legado dado a las artes visuales por movimientos como el impresionismo, el expresionismo o el cubismo.

La figura femenina centra la propuesta de Cordero Salas en la que, como indica su título, se hace evidente la persistencia de este creador en cuanto a temas, afanes de superación y búsqueda.

Las tres exposiciones estarán abiertas al público en la institución de Luz y Oficios hasta mediados del mes de mayo.