Interioridades e inmensidad de la mujer es el título de la exposición de Anisis González Bello, inaugurada este viernes en el capitalino Palacio de los Torcedores como un homenaje de la Central de Trabajadores de Cuba a la FMC, en el aniversario 55 de organización que agrupa a las féminas de la Mayor de las Antillas.

Con una obra que  desde 2012 se caracteriza por un personal discurso de género, en función del cual ha puesto las más diversas técnicas que agrupan las artes visuales, la selección de una muestra antológica de esta artista por la efeméride del 23 de agosto resulta un acierto que podrán agradecer quienes visiten la instalación centrohabanera.

Los modos en que la mujer ha sido sometida a lo largo de la historia y los tabúes que ha debido enfrentar resurgen de una u otra forma en las casi cuarenta piezas que conforman la exposición, entre las que no faltan destellos de sensualidad y una mirada desacralizadora  capaz de brindar otro enfoque a temas ya transitados.

Destacan en la muestra la serie de fotografía digital y los repujados en metal que reciben al espectador en el primer salón, en particular el titulado La penúltima cena. Asimismo los retablos, la escultura que se exhibe bajo el rótulo de Crucifixión y una instalación: Epicentro del amor,  que franquea la entrada a la segunda sala.

Pero más allá del concepto que pueda encerrar cada obra, la propia capacidad de la artista para realizarlas -a partir, incluso, del dominio del metal o los secretos del lente- es el más diáfano mensaje del talento y las fortalezas de ese sector de nuestra población que desde hace 55 años agrupa la FMC.