La cineasta cubana Marina Ochoa regresa a la Operación Peter Pan


la-cineasta-cubana-marina-ochoa-regresa-a-la-operacion-peter-pan
Cineasta cubana Marina Ochoa

Hoy a las 8 de la noche tendrá lugar en el cine 23 y 12 la premier del largometraje documental Never ever neverland, de la cineasta cubana Marina Ochoa, que es una de las principales propuestas del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos para celebrar el Día de la Cultura Nacional.

Marina Ochoa, junto a Lina Baniela, editora y Grissel González, productora, sostuvo un intercambio con representantes de la prensa nacional a propósito del estreno de su más reciente realización de 100 minutos, que es una coproducción del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos y la Villa del Cine de Venezuela.

Foto: Susana Méndez

La directora declaró que fue un proyecto muy complicado en sentido general por los objetivos artísticos que se propuso y porque es un tema sensible desde el punto de vista político, y especificó que su intención había sido dar una visión complejizadora del fenómeno.

Ochoa tiene como antecedente a este trabajo el documental Detrás del cristal que codirigiera con el realizador Guillermo Centeno en 1994, y que es su primera incursión fílmica en el tema de la Operación Peter Pan, por medio de la cual salieron hacia Estados Unidos más de 14 000 niños cubanos que viajaron solos entre 1960 y 1962, y que fuera concebida y organizada tras una campaña de terror, que sostenía que el gobierno revolucionario despojaría de la Patria Potestad a los padres de los niños cubanos y los enviaría a la Unión Soviética.

La realizadora tiene la vivencia familiar de este fenómeno inédito en la historia de Cuba, y en virtud de esta posición brinda una mirada diferente a la del mencionado documental, e incluso al que realizara Estela Bravo, Operación Peter Pan: cerrando el círculo en Cuba, en el 2010.

“Mientras más me adentro en este tema digo sí, yo pude haber mandado a mi hija si hubiera estado en esas circunstancias y hubiera pertenecido a esa clase social (…) yo vi a mi madre tomar esa decisión y yo no la entendía y la vine a entender en la medida en que me he ido adentrando en esta temática”, confesó Marina Ochoa.

Por otra parte ha entrevistado a muchos implicados en la historia desde esquinas diferentes; constató en las grabaciones de 1994 para Detrás…, que muchos Peter Pan, tienden a culpabilizar a sus padres por haberlos enviado solos a un país extraño siendo unos niños, incluso aquellos que agradecen la decisión a partir de lo que han logrado ser en la vida.

Este fenómeno hizo que Ochoa tomara la decisión de hacer un documental que fuera una especie, si no de justificación, sí que presentara las causales múltiples que llevaron a tantas madres y padres a preferir separarse de sus hijos a que éstos permanecieran en Cuba; “un documental que fuese una especie de sanación de los sentimientos de rencor y resentimiento de los Peter Pan hacia sus padres, entendiendo el proceso en que éstos habían estado inmersos y entendiendo la campaña que hubo contra ellos”.

Marina,-autora de la idea original, el argumento y el guión-, intenta reconstruir y presentar con entrevistas recientes y otras de la década del 90, la situación socio ideológica y psicológica en que se encontraban los padres que decidieron involucrar a sus hijos en la Operación Peter Pan.

El documental expone cómo estos estaban sometidos a una manipulación extrema en cuanto a la información que recibían acerca del comunismo y sus males; por otra parte muchos de ellos, pertenecientes a la clase media, habían sido afectados por las leyes revolucionarias de nacionalización, con lo cual ya tenían una razón para no aceptar la Revolución, y también confiaron en que si la Iglesia era la responsable de la guarda y cuidado de los niños, éstos estaban en buenas manos.

Por demás, tenían la esperanza de que la situación en Cuba cambiara en algunos meses, que Fidel no se mantendría en el poder y que todo volvería a ser como antes.

Aseguró la directora de Never ever neverland que uno de los objetivos del filme es que todo el mundo entienda cómo fue posible este hecho insólito en América. “Yo me quedé insatisfecha con Detrás… pues sentía la necesidad de explicar y de que la gente entendiera por qué, cómo pasó, como se hizo, y quiénes estuvieron involucrados, porque había una especie de vacío de esta información”.

“Yo tenía esta deuda, y me sentí en la obligación de hacer un documental como éste, que sentía que estaba faltando para entender en su magnitud este fenómeno, uno de los más trágicos en la historia de la Revolución Cubana, y menos conocido, porque se atacó a la familia y a los sentimientos filiales”, subrayó.

La banda sonora del documental utiliza a lo largo del mismo, canciones infantiles en voces de niños. A propósito la cineasta comentó que hay imágenes muy gastadas y cuando se montan sobre esos temas adquieren otra dimensión, “la selección musical la utilicé en función dramática, para crear atmósfera o porque tiene la canción que ver exactamente con lo que está pasando en imágenes”.

El título es un juego de palabras con “La tierra de nunca jamás” del cuento Peter Pan, lugar donde los niños pierden la memoria, las raíces y olvidan a sus familias; “es un título construido sobre este análisis”, explicó Ochoa.

El documental hacia el final hace referencia el intento de reeditar en Venezuela en el 2009 esta trágica experiencia, a través de entrevistas a algunos testigos de este fracaso.

La realizadora, afirmó que este es un tema no agotado y que su equipo de realización cuenta con mucho material fílmico importante que pretende utilizar, y anunció que está prevista la realización de una serie de 6 capítulos donde se ampliará la información recogida en el documental a partir del desarrollo de algunas personalidades de mucho interés descubiertas en las filmaciones.

Never ever neverland, pasará a partir del día 23 al circuito nacional de estrenos de toda la Isla.


0 comentarios

Deje un comentario



v5.1 ©2019
Desarrollado por Cubarte