“Cienfuegos es la ciudad que más me gusta a mí”, reza el estribillo de una de las inmortales melodías de Benny Moré, músico de talla universal nacido en el municipio cienfueguero de Santa Isabel de Las Lajas.

El genial artista se sintió seducido por la urbe sureña, como le sucede a todos los que nacen o visitan esta ciudad, conocida también como la Perla del Sur, distante a 250 kilómetros al sudeste de La Habana.

Desde julio del 2005, el Centro Histórico de Cienfuegos se inscribe en la preciada lista de lugares declarados Patrimonio Cultural de la Humanidad, reconocimiento de alcance universal que premia el esplendor, conservación y singular arquitectura de esa zona, que abarca 70 manzanas, entre ellas, la que sirvió de punto de partida para la fundación de la localidad por colonos franceses el 22 de abril de 1819, única ciudad cubana, que instauraron representantes de la nación gala.

Otrora Fernandina de Jagua, a Cienfuegos se le concede el título de villa en 1829 y el de ciudad en 1880, considerando, según consta en el acta de proclamación, “el aumento de su población, el progresivo desarrollo de su riqueza agrícola e industrial y la importancia de su puerto marítimo”.

Este progreso se aprecia en sus construcciones de estilo neoclásico y de formas eclécticas, con una armonía impresionante, que complementa el trazado recto y ancho de sus calles, el cual realza el brillo de esta ciudad, devenida joya arquitectónica del siglo XIX.

“Es un caso excepcional del urbanismo y la arquitectura del siglo XIX cubano”, apunta la especialista cienfueguera María Dolores Benet León.

Para la arquitecta y profesora cubana Isabel Rigol, “Cienfuegos es una ciudad que representa el pensamiento más avanzado en materia de urbanismo y arquitectura del siglo XIX, las ideas de la Ilustración. Fue plenamente erigida en este siglo, no como otros casos de ciudades del XVIII, que fueron ampliadas o modernizadas. Además de las edificaciones del siglo XIX, sobresale la magnífica colección de inmuebles de principios del siglo XX de corte ecléctico.”

Edificios que pueden apreciar quienes recorren el área del parque José Martí, conocida anteriormente como Plaza de Armas, donde en una roseta de mármol se indica el lugar exacto en el que comenzaron a erigirse las primeras manzanas de la ciudad y está grabada el acta fundacional.

En el parque resalta además el Arco de la República, único de su tipo en Cuba; la glorieta, construida desde 1921, así como un conjunto de esculturas, entre ellas las de los dos leones de mármol.

Alrededor de esa plaza, se encuentran edificaciones muy bien conservadas como el teatro Tomás Terry, que este año festeja su aniversario 125 con una variada programación que ha incluido la presencia de la prima ballerina assoluta  Alicia Alonso junto al Ballet Nacional de Cuba y el pianista Frank Fernández, entre otros reconocidos artistas.

Muy cerca del coliseo, se ubican el Colegio San Lorenzo, antigua Escuela de Artes y Oficios; la catedral de Nuestra Señora de la Purísima Concepción, con sus hermosos vitrales; el Palacio de Gobierno, y la Casa del Fundador, residencia de Luis D’ Clouet.

En el Centro Histórico está el Bulevar de San Fernando con librería, galería, salas de teatro, comercios, banco, oficinas, y el corredor de Santa Isabel, devenido sitio para feria de artesanía y la presentación de proyectos comunitarios, vinculados a la Oficina del Conservador de la Ciudad (OCCC), institución creada en 2007.

El Paseo del Prado, el más largo de Cuba, atraviesa parte de la ciudad y es también sitio obligado de visitar. Las casas tienen portales, que nos brindan sombra y ayudan a sobrellevar el sol intenso propio de esta isla caribeña.

Pero Cienfuegos tiene otros atractivos que mostrar al visitante. Su condición de ciudad marinera permite disfrutar de su malecón y de lugares como el Muelle Real, que se ha convertido en un espacio para trovadores y grupos de teatro que cada día gana más aceptación del público.

“El vínculo de la ciudad con el mar es un elemento identitario de Cienfuegos. Lo que realmente ha hecho trascender a la Perla del Sur es esa imagen marinera, ese abrazo de la ciudad y su entorno con el mar”, señala el arquitecto Irán Millán, director de la OCCC.

Y ese resulta uno de los atractivos por las cuales los cienfuegueros son muy apegados a su terruño natal. Los trovadores Pedro y Roberto Novo, reconocidos como los “cronistas de la ciudad”, expresan en una de sus canciones “Yo soy, cubano, cubano de Cienfuegos /Aquí tengo mi lugar/mi son y mi poesía/mi montaña y mi bahía/mi sol, mi río y mi mar/...”

La especialista María Dolores Benet afirma que “este sentido de pertenencia que nos caracteriza a los cienfuegueros, ha hecho que, guiados por aquel lema, que el 22 de abril de 1819 pronunciara el fundador, el teniente coronel Don Luis Juan Lorenzo D´Clouet, ´Fe, Trabajo y Unión´, hayamos logrado mantener, por todos los tiempos, el brillo y el esplendor de nuestra hermosa y única Perla del Sur.”