En plena faena recibió este martes el pintor y escultor santiaguero Alberto LescayMerencio la noticia de que se le había otorgado el Premio Nacional de Artes Plásticas 2021, máximo reconocimiento con el que desde 1994 el Consejo Nacional de las Artes Plásticas (CNAP) reconoce anualmente a un creador vivo y residente en el país, por la obra de un largo período de su existencia.

“Estaba modelando los pies de José Antonio Aponte para la escultura que se colocará a la entrada de La Habana”, expresó al Periódico Cubarte refiriéndose al momento en que recibió la llamada telefónica de los miembros del jurado encargado de analizar las 18 propuestas enviadas este año por varias instituciones de la cultura.

“Siempre es una sorpresa recibir un premio, al menos para mí. En lo personal, el gran premio que siempre añoro es el premio de la crítica, el del pueblo, el del universo todo que es para el que trabajo.

Pero, que de entre tantos talentos, tantos colegas valiosos que existen en el país, me hayan otorgado el premio por la obra de la vida es algo que me emociona, recibo con mucho respeto y haré todo lo posible por continuar mereciéndolo”.

Minutos antes, el pintor y grabador Rafael Zarza, presidente del jurado en esta ocasión, había declarado a la prensa reunida en la sede del CNAP.

“Creo que el jurado ha hecho un trabajo magnífico, ha sido muy justo. Lescay es un artista no solo querido como persona, sino también respetado como creador por la obra tan intensa que tiene.

El Premio ha sido otorgado por unanimidad. Espero que, al igual que él, todo el mundo esté muy contento con esta decisión. Lescay tiene una obra muy sólida, no solo en la escultura monumental, sino también en la pintura. Es fundador de la Fundación Caguayo, ese taller fabuloso que ha hecho tanta obra.

Me alegro mucho también que el Premio haya caído en Santiago de Cuba para que así no nos acusen de regionalistas”, concluye medio en broma quien también fuera reconocido con este alto galardón en 2020.

Por su parte, el crítico de arte Jorge R. Bermúdez, integrante del jurado esta vez, calificó de muy significativa la trayectoria de Alberto Lescay en nuestra cultura visual, tanto por la continuidad en el tiempo, como por la calidad de su obra.

“Sobre todo en esta última etapa, en la que se manifiesta un cierto expresionismo a una escala a veces monumental, como es el caso del monumento a Mariana Grajales y el de Martí que está en la Avenida de las Américas, en Santiago de Cuba.

Pero, además, Lescay tiene otro mérito que me parece muy importante y es que ha creado una Fundación como la Caguayo, la cual ha permitido que una serie de artistas se proyecten en el ámbito de nuestras artes.

También ha apoyado mucho al Diseño, incluido el Diseño Industrial que, por lo general, siempre se deja a un lado en toda esta cuestión de los premios y concursos. Se sigue eligiendo a las Artes Mayores con una mentalidad del Renacimiento Italiano y, por consiguiente, solo se consideran Artes Mayores las Artes Plásticas, cuando ya hoy día hay una serie de artes, como las artes gráficas, por ejemplo, que se vinculan de manera decisiva en el protagonismo visual de nuestros tiempos”.

Otro de los integrantes del Jurado, el escultor José Villa Soberón, reconocido asimismo con el Premio Nacional de Artes Plásticas en 2008, señaló:

“Este trabajo del Jurado, no siempre asumido por las mismas personas, es complejo y difícil porque no cabe dudas de que siempre hay varios compañeros con una obra merecedora también del Premio Nacional, pero solamente hay que escoger a uno.

Celebro mucho que este año hayamos podido escoger a Lescay. Es una celebración doble en lo personal por el respeto y la admiración que siento por su obra y celebro también que sea un escultor. Es algo que me parece que todos los escultores vamos s disfrutar muchísimo.

Que sea santiaguero, también. Hay artistas importantes fuera de la capital que han hecho una obra y en eso Lescay es una persona destacadísima. Lescay es hombre brillante, y podemos reconocer la obra que ha hecho en muchas zonas de la cultura”.

Nacido en Santiago de Cuba en 1950, Alberto Lescay Merencio es graduado de la Escuela Nacional de Artes y de la Academia Repin de Escultura, Arquitectura, Pintura y Gráfica, en San Petersburgo, Rusia.

Tiene obras emplazadas en varios países y ciudades cubanas, entre ellas la más conocida es la escultura de Antonio Maceo ubicada en la Plaza de la Revolución de Santiago de Cuba.