Hace pocos días la Academia de la Grabación de Estados Unidos celebró la 58 entrega anual del publicitado Premio Grammy en sus 83 categorías. Para los cubanos esta edición del certamen revestía una importancia singular porque el Septeto Santiaguero estaba nominado en el apartado de Mejor Álbum Tropical Latino con el doble CD No quiero llanto. Tributo a Los Compadres.

Ya ganador del Premio Cubadisco y del Latin Grammy el año pasado, la producción del Septeto de conjunto con el cantante dominicano José Alberto “El Canario” competía por el gramófono dorado junto a los álbumes Presente continuo, de la orquesta venezolana Guaco; Todo tiene su hora, del dominicano Juan Luis Guerra y su 440; Que suenen los tambores, del boricua Victor Manuelle; y Son de Panamá, de la estrella de la salsa Rubén Blades, quien finalmente se llevó el premio a casa.

No cabe dudas de que cada una de las propuestas contaba con la calidad suficiente para ser la ganadora, en justo reconocimiento a esto e inmenso acto de humildad Blades lo reconoció en misiva enviada al tresero Fernando Dewar, líder del Septeto Santiaguero.

“Amigos, reza el mensaje del cantante itsmeño, aquí nadie pierde. Es absurdo considerar que en esta situación ha habido perdedores. Al contrario, se fortalecen las conexiones de respeto. Reciban nuestro afecto y admiración, por su trabajo y su trayectoria”.

Como bueno cubanos, la respuesta de Dewar y sus muchachos no se hizo esperar agradeciendo las palabras del exitoso músico que se hizo popular con canciones como Pedro Navaja y Tiburón.

“Nos honra muchísimo con sus palabras, señala el director del Septeto Santiaguero, crecimos con su música y nos mantenemos escuchándole. Todos disfrutamos de Son de Panamá desde que salió,  fue muy emotivo al escucharlo por primera vez y oír que la primera frase que se dice en ese disco hace alusión a Santiago de Cuba”.

Más adelante Dewar recuerda la importancia de la figura de Blades en el trabajo reciente de la agrupación. “Fue precisamente el maestro Rubén Blades el primero en colaborar con el impulso que ha tenido nuestra carrera en estos años recientes. Le hicimos la invitación a participar en nuestro disco Vamos pa´ la fiesta y el mismo día, a pesar de ser domingo, nos dijo que sí”.

Vamos pa´ la fiesta, editado por el sello catalán PICAP, mereció el Premio Cubadisco 2013 y fue nominado al Grammy Latino ese mismo año. La placa es sin dudas una verdadera joya de la música tradicional cubana por muchísimos aspectos, entre ellos la selección del repertorio y la calidad de los artistas invitados, entre los que, ya se sabe, figuró Blades que dio su voz a dos temas antológicos de nuestra música: Lágrimas negras, de Miguel Matamoros, y Contéstame, de Arsenio Rodríguez.

En el intercambio de mensajes no faltaron las palabras para “El Canario”: Una vez más las gracias a José Alberto “El Canario” por haber sido un gran compañero de travesía en esta exquisita aventura que ha sido el disco, apuntó Dewar.

No quiero llanto… cierra así un ciclo, aunque todavía le queda mucho por andar. Con esta producción el Septeto Santiaguero ha demostrado de cuánto es capaz, aunque ha subido el listón a alturas realmente difíciles de superar. Por lo pronto ya sabemos que cocinan un nuevo disco bajo el sello EGREM, solo esperar.