Reconocida en el mundo del arte por sus obras instalativas y audiovisuales, la artista de la plástica chilena Alicia María Villarreal Mesa, quien estuviera presente  en la Oncena Bienal de La Habana vuelve a esta edición a intervenir en espacios de la ciudad.

Durante la Bienal de 2012 Alicia Villarreal participó en el programa teórico Arte y Pedagogía que tuvo lugar en el ISA durante el magno evento de la plástica en Cuba, dedicado en esta ocasión a la idea curatorial “Prácticas artísticas e imaginarios sociales”. Su obra muestra una dimensión reflexiva sobre la memoria personal y colectiva y sobre el lenguaje y los medios de producción artísticos.

Sin embargo, a pesar de haber utilizado diversos soportes en su carrera artística la Villarreal aboga por el aprendizaje y la práctica espontánea. Luego de incursionar en la pintura, Alicia se inclinó hacia la escultura para posteriormente, transitar hacia la instalación y el videoarte.

Luego de residir por varios años en Florencia, Alicia Villarreal desarrolló una investigación sobre el arte antiguo y su iconografía. Sobre ello comentó: “Conocer la historia de quienes elaboraban este tipo de obras, te permite valorar tu responsabilidad como artista. La persona que elaboraba íconos, era una persona consagrada a la religión, elegido para este oficio. Esperaban el momento justo para aplicar cada color, según lo indicaran los astros. Por eso, los íconos de estas culturas no presentan colores agresivos y son muy armónicos”.

Alicia Villarreal es una de las artistas de la plástica contemporánea que aboga por la interrelación del creador como individualidad y las representaciones que realiza de sus entornos, teniendo en cuenta este presupuesto ha expresado: “el artista debe sentirse responsable de sus creaciones, puesto que a veces expresa cosas de su interior, cosas desagradables o terribles que causan malestar al espectador. La iconografía busca el bienestar mutuo, tanto del artista como de quien lo observa”.

En la actualidad Alicia se ha inclinado más hacia el arte conceptual y el experimentalismo como tendencias del arte contemporáneo. Sus obras Ejercicio de copia (2003), Musba, Museo de Barrio (2008) y Condición de lugar (2009) expresan esas tendencias y recibieron importantes nominaciones en las categorías de instalación y videoarte. En el año 2010 fue acreedora del Premio Altazor de las Artes Nacionales en su país por el trabajo Grabar el territorio, en la muestra  colectiva: Territorios de Estado: Paisaje y Cartografía de Chile, Siglo XIX.

Contar con la presencia de esta reconocida artista chilena en esta Duodécima Bienal de La Habana será sin dudas una oportunidad privilegiada, desde el punto de vista teórico como en la presentación de su obra más reciente. Al tanto entonces del programa del evento que hará encontrarnos con la obra de Alicia Villareal en cualquiera de los entornos capitalinos en los que exhibirán los creadores.