Emotiva, como todos los encuentros de Eduardo Roca Salazar con sus admiradores y amigos, fue este miércoles en el Museo Nacional de Bellas Artes la presentación del catálogo Choco: el soplo de la vida, valioso y hermosísimo volumen puesto en circulación por el sello Collage Habana, del Fondo Cubano de Bienes Culturales y Ediciones ArteCubano, del Consejo Nacional de las Artes Plásticas.

Organizar un diálogo coherente entre la obra de dicho creador y el discurso crítico que la ha acompañado a lo largo de 48 años ha sido, según su editor Jesús David Curbelo, el propósito de un libro que en sus casi 300 páginas muestra un sinnúmero de reproducciones; además de textos de reconocidos intelectuales como Abel Prieto, Eusebio Leal, Eliseo Diego, Miguel Barnet y Nancy Morejón; fotografías, una extensa entrevista y una cronología.

En la presentación, Nelson Herrera Ysla, prologuista de la edición bilingüe, se refirió al inevitable vínculo que al observar una obra de este autor siempre se establece entre la personalidad de Eduardo Roca Salazar y el artista que es Choco, correspondencia ya captada por el autor de En la Calzada de Jesús del Monte desde la primera exposición del Premio Nacional de Artes Plásticas 2017.

“Parece que el hombre que es Eduardo Roca Salazar es el pintor, dibujante, grabador y escultor que es Choco. Algo así como una coherente expresión de humanidad y creación”, expresó Herrera Ysla.

Asimismo, señaló la ausencia de todo indicio de violencia en la obra de este artista y la coherencia de su trayectoria, en la que ha prevalecido la figuración; no obstante, las señales de ruptura y experimentación que en los últimos años parecen abrir nuevos caminos para él.

Con muy sentidas palabras, el Dr. Eusebio Leal destacó la importancia de este libro que burla el carácter efímero de las exposiciones y la dispersión de los textos aparecidos en los diferentes publicaciones periódicas y medios de difusión, paciente y amorosamente recopilados por Gloria García Enríquez, esposa del artista a la que le está dedicado el volumen.

“Tú eres el que eres y a nadie tu obra la pediste. Ni reconozco yo en ella influencia de nadie que no sea lo que hay en tu poderosa imaginación. Yo sé con cuánto esfuerzo, con cuántas lágrimas, con cuánto cariño esa obra se ha forjado”, afirmó el Historiador de la Ciudad, para luego referirse a la generosidad y ausencia de vanidad de quien considera un hermano.

La presentación, iniciada con la declamación hecha por la actriz Corina Mestre del poema que Roberto Fernández Retamar dedicara al artista, concluyó con la breve sentencia de un Choco profundamente emocionado y agradecido: “Hay que ser generoso y seguir trabajando”.