El teatro del Museo Nacional de Bellas Artes fue escenario para la presentación de un volumen sobre uno de nuestros más valiosos exponentes de las artes plásticas cubanas. Sosabravo sobre papel es el título de este libro, un homenaje al destacado artista Alfredo Sosabravo, quien este viernes arribó a sus 89 años de edad.

El volumen que sale a la luz por Ediciones Collage Habana recoge varios artículos y reseñas sobre el consagrado ceramista, grabador y pintor. El texto presentado por el crítico e investigador Rafael Acosta de Arriba ofrece además ilustraciones de diversas obras de Sosabravo que son un regalo al público de un artista que fue y es maestro de generaciones.

La pintora y curadora Lesbia Ven Dumois agradeció enormemente esta publicación a un hombre que durante su vida se ha consagrado a las artes plásticas, un hombre que a pesar de ser autodidacta ha podido colocarse en la vanguardia del panorama visual de la Isla con una obra que trasciende fronteras por la calidad de sus trazos, el genio de su imaginación creativa  y su estética única e inconfundible.

Lesbia comentó al auditorio anécdotas junto a Sosabravo de su etapa en los talleres de grabado, y otros momentos en los que ambos artistas consolidaron su hermandad. Al decir de Lesbia “este es un merecido homenaje a Sosa, porque ha sabido crear y mantener una estética, y más merecido porque sigue creando a pesar de su edad.”

Sosabravo compartió con el público y algunos de sus alumnos presentes —quienes ya forman parte de otra generación—, su agradecimiento y alegría por esta publicación; y ante la pregunta de cuánto significaba este regalo para él respondió: “Yo he sido maestro de muchos de los que han llegado hasta aquí desde los años sesenta. Yo agradezco mucho esto porque es un regalo a mí y también a los que me siguen, a los jóvenes. Soy un artista figurativo de los años sesenta que sigue y seguirá trabajando hasta que pueda. En este libro está parte de la gráfica que he hecho. No está toda porque serían entonces varios libros. Para este se escogieron una parte de serigrafías, litografías, obras en metales, en papel, pero no está todo, sino que es solo una selección, de la que agradezco a todos los que han colaborado.”

Artistas que conforman la vanguardia de las artes plásticas contemporáneas vieron en Sosabravo un maestro, un guía. Muchos de los presentes en el encuentro demostraron la satisfacción de esta publicación para Sosabravo y también para el panorama visual del país. “Yo soy un ejemplo de las enseñanzas de Sosa. Él fue mi primer maestro en la Escuela de Instructores de Arte en la década del sesenta. Me enseñó mil cosas, hizo posible que nosotros hiciéramos nuestra carrera, con mucha fuerza, con mucha inteligencia, con mucha educación. Sosa está dejando un legado que para nosotros, para los más jóvenes, para la generación completa de Cuba es una joya. Hay que acordarse siempre de Sosa como un precursor de las artes plásticas cubanas. Sosa es y será siempre uno de nuestros grandes pilares de la plástica cubana”, expresó el destacado artista Choco.

A la pregunta de cuánto significaba este regalo a Sosabravo para las artes visuales de la Isla, la camagüeyana Flora Fong respondió: “Sosabravo es el ejemplo mayor; diría yo que uno de los artistas más importantes de la plástica que tenemos acá en Cuba, y esta publicación nos permite hacer ese recorrido grandísimo que ha hecho en las artes plásticas cubanas”.

José Villa Soberón, gran exponente de la escultura nacional, sintió gran  satisfacción y emoción ante este regalo que se le hace a un hombre tan consagrado a su labor pictórica: “A mí me parece extremadamente interesante lo que está haciendo Sosabravo. Yo creo que es muy importante  agrupar en un libro una de las partes más creativas de Sosabravo. Sosabravo es un artista de mucha creatividad, pero quizá una parte de su obra menos conocida es precisamente la obra sobre papel. Todos estamos acostumbrados ver a Sosabravo como el gran ceramista que fue, como el gran pintor, pero su obra en papel no ha sido lo suficientemente conocida y divulgada. Este libro va a servir mucho para ver cómo desde el papel Sosabravo fue una persona que experimentó mucho en su trabajo, en el grabado y en la plástica en general. Estas son acciones que consolidan mucho el conocimiento de la obra de Sosabravo y el conocimiento de la plástica cubana“.

La ocasión fue propicia también para la presentación del documental Sosabravo, su cuarta dimensión, de la realizadora Teresa Huerta; un material audiovisual que nos acerca a la obra creativa de este hombre que casi a sus noventa años de edad no para de crear y poner en relieve los valores de las artes plásticas cubanas.