Evangélicas y divorciadas, es la obra que repone el grupo de Teatro de las Olas, bajo la dirección de Eneyda Villalón Puig, el próximo 15 de mayo a las 3:00 p.m. en su sede en Batabanó, provincia de Mayabeque.

Surgido en enero del 2001 bajo el amparo de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), Teatro de las Olas asume expresiva y conceptualmente la voz y la imagen de los pueblos pescadores y costeros de la isla, especialmente los de la antigua provincia Habana.

Al decir de Omar Felipe Mauri Sierra, presidente de la Uneac en Mayabeque:

Es cuidadosa la labor que realiza el colectivo en la búsqueda constante de un repertorio entrañablemente cubano y a la vez universal. Sus recursos escenográficos son contados, pero muy útiles. La música, realizada en la propia escena, refuerza la comunicación con el público y las claves de lo cubano y lo popular, y sobre todo, explota a fondo las cualidades físicas de los actores. La propia Eneyda Villalón posee excelentes posibilidades vocales y danzarias pues laboró en el Teatro Lírico de Holguín durante varios años y en conjuntos dramáticos de Santiago de Cuba.

En la labor de Las Olas, destaca Jesús “Chuchy” Fernández, quien aporta su larga experiencia en el diseño y la escenografía, además de dirigir obras y actores, asesorar las puestas y ser de máxima utilidad en la preparación del repertorio.

Hace dos años Las Olas cuenta con una sede propia (una sala de video acondicionada por ellos mismos), que abrió posibilidades para abordar variantes teatrales más exigentes y de mayor profundidad de pensamiento con el público; lo cual no significa que la agrupación haya abandonado el trabajo en comunidades y barrios de la localidad, porque “tan necesario es contar con un edificio teatral como con el patio de una escuela o el batey de una comunidad”.

Carolina de Alto Songo, de la dramaturga cubana Carmen Duarte, Cuánto me das marinero, y más recientemente Auto-da-fe, del norteamericano Tennessee Williams, fijan a Teatro de las Olas —de Batabanó—, en la escena nacional.