“Nosotros los artistas tenemos la responsabilidad de cambiar a las personas y a veces no solo directamente con la obra de arte, sino con el tiempo que dedicamos a conversar, a crear conciencia de cuánto puede sanar el alma y cuánto se engrandecela visión de la vida a través del arte.”

Declaró el joven artista visual Jorge Yunior Gutiérrez Salomón, en ocasión de celebrarse ayer 6 de marzo, el Día Internacional del Escultor, homenaje al nacimiento del italiano Miguel Ángel Buonarroti, arquitecto, escultor y pintor del Renacimiento,  considerado uno de los más grandes artistas de la historia.

Salomón se propuso establecer su residenciaartística en “ese lugar perfecto”, como él denomina a la Fábrica Conformadora de Métales Noel Fernández, en Matanzas, con el propósito de “trabajar con los materiales de desecho de la producción industrializada” y crear esculturas devenidas obras de arte, ideales para la venidera Bienal de La Habana en la Atenas de Cuba, a inaugurarse el próximo primero de abril.

Y añadió: “Ha sido una experiencia en extremo interesante. Con una carretilla cargué ocho toneladas de acero y las coloqué en un espacio a la intemperie para construir imágenes que no todos entienden. Lo mejor es que en este momento estoy trabajando para la edición Ríos Intermitentes II en Matanzas. Quiero agradecer que me hayan invitado y, de manera especial, a la dirección de esta empresa, que en una situación económica tan difícil con los recursos a nivel nacional, ha colaborado con este proyecto.” 

Salomón le seguía los pasos al famoso artista nigeriano Olu Oguibe, quien se asentó en ese mismo lugar a concebir sus figuraspara el primer proyecto yumurino en el 2019, por invitación de María Magdalena Campos Pons.

Ahora el joven creador se ha apropiado del imaginario surgido de la recortería metálica, útil en su primitiva función, obra artística en su nuevo cometido y ofrecerá al público,integrándose a la propuesta ecológica de este ciclo, alrededor de cien piezas, en conjuntos, a distribuir por los diferentes espacios o jardines de la ciudad.

Sobre esta intervención, el artista declaró:

“Me siento bendecido por llegar a una fábrica, donde antes no se comprendía bien quién era este artista que se movía entre ellos, incluso cuando estuvo el maestro OluOguibe y pensaban que era un arrebatado con aquellas ideas y ahora yo, otro locoigual, hubo una respuesta, porque la realidad es que el arte crea un enigma sagrado en el ambiente. 

“Pienso en que este es uno de los proyectos más ambiciosos donde he trabajado y quizás en el que más riesgo he corrido: ver la fotografía, la pintura y la instalación hasta alcanzar la concepción del todo en la visión del metal. 

“Una de las obras de grandes dimensiones es un tarjetero de marcar la entrada y salida del trabajo, que a partir del vínculo con el perfil ecológico de esta Bienal matancera, pienso utilizarlo como un gran formulario botánico, ligado con el proyecto del Jardín Martiano que presenta el artista José Antonio Hernández Álvarez. Estoy en la faceta de la pintura a nivel industrial, que lleva un horneado y otras técnicas, para evitar el óxido del salitre, que llegaría de la bahía con el viento hasta Monserrate.”

Jorge Yunior Gutiérrez Salomón es egresado desde hace 15 años de la especialidad de pintura y dibujo de la Escuela Profesional de Arte “Roberto Diago Querol” en la ciudad de Matanzas. Y aprendió otras formas artísticas aquí en su ciudad natal. 

Sus obras son exhibidas en el Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba, la Bienal de Arte Contemporáneo de Venecia y Bolonia en Italia y también en una treintena de países. Ha realizado más de 20 exposiciones personales dentro y fuera de Cuba, más 80 exposiciones colectivas.

La concepción integral del proyecto ideado por Salomón para Ríos Intermitentes IImanifiesta el dominio del artista en las diversas manifestaciones de las artes plásticas y responde a su inquieta perspectiva del entorno, en la cual ha incluido, como preferente, a lo largo del tiempo, la temática sincrético-religiosa, tan arraigada en la urbe yumurina.