Este lunes 20 —con un acto oficial, una conferencia a cargo de Gisela Herrero, directora de la Oficina Nacional de Diseño (ONDi), la apertura de dos muestras y un acto efectuado en el Cine Chaplin— arrancó en la capital cubana la 2da. Bienal de Diseño de La Habana (BDH 2019), que se extenderá hasta el próximo 17 de junio y que tendrá acciones en varias provincias y contará con 14 sitios expositivos.

En horas de la tarde quedó abierta en la Fundación Ludwig en El Vedado habanero y con la asistencia de la presidenta del Consejo Nacional de las Artes Plásticas, Norma Rodríguez Derivet, y numeroso público, la Exposición de Diseño Contemporáneo: Forma… mucho más allá de la forma, que agrupa el quehacer de una veintena de diseñadores y en la que participan dos destacadas instituciones del patio: la Casa de las Américas y el Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau.

Helmo Hernández, director de la Fundación Ludwig, manifestó sentirse satisfecho por haber brindado a la Bienal los espacios de la institución para la realización de este proyecto “tan abarcador”, según lo calificó.

Concha Fontenla, curadora de la muestra, apuntó que se exhibe no solo la forma sino “el pensamiento, las ideas, el usuario y la bolsa de necesidades, la función y las relaciones que se establecen de recuerdos, pensamientos, situaciones de memoria y de educación del gusto”. Reiteró la reconocida especialista —española de nacimiento y cubana por decisión— que la exposición posee “una mirada hacia el futuro y hacia adelante”.

Subrayó que es “fantástico comprobar que apenas unos días de concluida la XIII Bienal de La Habana, podemos encontrar gente joven entusiasta —y otros no tanto— y aplaudir cómo se juntan y pasan noches y madrugadas para seguir trabajando y continuar creando”, concluyó.  

En un aparte con el Periódico Cubarte, Gisela Herrero, presidenta de la BDH 2019 y de la ONDi, calificó “de muy importante”, el hecho de que la muestra lleve el mismo nombre de la Bienal, es decir, Más allá de la forma: “eso basta para poner en valor lo que significa el tema de estar agrupados aquí. Esta Bienal —y esta exposición— nos tienen ilusionados y esta ilusión no ha sido en vano porque este tipo de evento cuesta mucho organizarlo”.

Significó que la exposición fue pensada inicialmente para otro espacio, pero hubo que redireccionarla hacia la Ludwig y ajustarla a las condiciones del lugar: “aun así y a pesar de las complejidades y contrariedades es hoy una realidad; en ella hay una apuesta a la experiencia y a lo que uno tiene más allá del objeto o de la pieza de comunicación y todo ello pone en valor el trabajo de los diseñadores porque, al fin y al cabo, la Bienal la hacen los diseñadores”.

Recordó que “hay Bienal” porque hay diseñadores que encaminan sus esfuerzos y sus energías en función de ella: “muchas veces echan a un lado los proyectos que los ocupan para abocarse en la BDH 2019 y poder testar, polemizar y confrontar criterios que, en definitiva, hacen crecer la profesión. Lo que queremos es estar cada vez más responsabilizados con lo que el país está demandando en cuestión de diseño”.

En otro momento del diálogo abordó la importancia que le concede al hecho de que el Centro Pablo y la Casa de las Américas estén compartiendo un mismo espacio: “no es casual porque son dos instituciones pilares y fundamentales del impulso del diseño y del uso del diseño en sus respectivas estrategias de desarrollo cultural. El diseño ha tenido un espacio y ha sido, de muchas maneras, un hijo querido en esas dos instituciones y es muy merecido de que estén juntos y estén aquí como parte de la Bienal”, concluyó.