El Noticiero ICAIC Latinoamericano fue una fuente de información, cultura y entretenimiento que se volvió infaltable en la experiencia de asistir a nuestras salas de cine. Este 6 de junio se cumplieron 61 años de su primera emisión que logró, semanalmente y sin interrupciones, capturar una época y cautivar a su público.
Su uso singular de la música, el humor y el montaje eran sus principales características. El tono documentalístico transversalizaba cada una de las entregas, cuyo eje central eran las noticias de nuestro continente y el resto del Tercer Mundo. “Trabajamos un estilo documental. Son monotemáticos, giran alrededor de ese nódulo, pueden ser variados, pero las todas las noticias gravitan entorno al mismo asunto…. Tratamos de buscar la permanencia de la información”, declaró una vez Santiago Álvarez, su director general.
Grandes personalidades del cine cubano formaron parte del proceso creativo. Entre sus créditos se encuentran nombres de la talla de Daniel Díaz Torres, Fernando Pérez, Jorge Fraga, Miguel Torres, y Manuel Pérez. El Noticiero contó, además, con trabajos animados por Juan Padrón para reforzar ese toque de humor criollo que tanto le gustaba al público.
En el año 2009, los negativos originales fueron incluidos en el programa Memoria del Mundo de la UNESCO, lo cual reafirmó su excepcional calidad artística y su valor histórico. Desde ese momento el Instituto Nacional del Audiovisual de Francia se encarga, junto al ICAIC, de la restauración del Noticiero.
Las imágenes que componen sus emisiones son un repositorio considerable del proceso revolucionario cubano. Contienen momentos trascendentales y personalidades históricas como el Che o Fidel. Su representación de la política internacional lo enmarca dentro del cine militante de izquierda, pues visualizaba las luchas de los pueblos por su liberación e intentaba reflejar temas apremiantes como la lucha contra el racismo y las distintas formas de discriminación a nivel mundial.
Varios de los temas se convirtieron en documentales dirigidos por el propio Santiago Álvarez. En la actualidad, existe una cátedra con su nombre en la Universidad de La Habana, encargada de mantener vivo el legado del realizador. Estas obras cinematográficas lograron inspirar a varias generaciones de directores y periodistas.
La influencia de Álvarez sobrepasa las fronteras de la isla y se extiende hacia latitudes tan lejanas como Vietnam, donde la huella de los noticieros y los documentales permanece en el recuerdo, como muestra del sentido internacionalista que los definía.
Para Hue Tran, periodista vietnamita graduada en Cuba, El Noticiero ICAIC representó un punto de giro en la forma de realizar las noticias, no solo por su agenda temática sino por la manera en que fue abordada, lo que permitió la creación de un estilo novedoso para la comunicación audiovisual.
“Puede decirse que, la obra de Santiago Álvarez lleva a muchas generaciones imágenes imborrables de los países del Tercer Mundo, entre ellos las de Vietnam en su lucha, escenas grabadas fuego y bomba. El lente del Noticiero ICAIC ha demostrado la solidaridad de Cuba hacia los países hermanos”, declaró.
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