Lina de Feria nació en Santiago de Cuba, en 1945. Con Casa que no existía recibió en 1967, el Premio David compartido con Wichy Nogueras (Cabeza de zanahoria). A mansalva de los años, 1990; El ojo milenario, 1995; Rituales del inocente, 1996 y A la llegada del delfín le valieron cuatro Premios de la Crítica. Fue Jefa de Redacción de la revista cultural El Caimán Barbudo y en el año 2005, estuvo nominada al Premio Nacional de Literatura. Cualquier mirada sobre la poética cubana incluye a Lina entre una de las voces más peculiares de su generación.