Cuando hablar de familia portadora de tradiciones, además de un profundo legado con un alto nivel de resistencia y perdurabilidad en la cultura cubana, de seguro no se puede dejar de mencionar a la familia Miranda.
Como sabemos, todo comienza hace casi ya un siglo y medio; cuando el tronco de la familia; el coronel mambí Vicente Acuña, aprovechando los dotes musicales e interpretativos como poeta se le ocurre la ingeniosa idea de junto con su hija Catalina y otros miembros de la afamada familia generar una agrupación tradicional con ritmos auténticos y un repertorio que los identificara como baluartes de la música de estirpe campesina y sonera mantenida hasta nuestros días por varias generaciones. Mientras no se puede dejar de mencionar tampoco a uno de los grandes precursores, quien significó figura indispensable en la génesis de lo que ha sido como tal el grupo portador de tradiciones “Raíces soneras”, nos referimos a Rafael Miranda, destacado cultor practicante que dominaba como nadie la totalidad de los instrumentos musicales que han sido parte de la historia de la familia Miranda, al quien he visto ejecutar en imágenes y videos de antaño específicamente la marímbula y el tres.
He tenido la dicha de visitar la comunidad de San Joaquín en el municipio tunero de Majibacoa por varios años, les confieso que me he sentido como en casa, la ingeniosa hospitalidad de Edhit, Erasmo, Mariela y Rocío es desbordante, desde la llegada al casón campesino respiras aire puro, desde temprano te pones en contacto con los elementos tradicionales más comunes de la vida de los campesinos, desde los propios instrumentos y vestuarios de la agrupación hasta el estropajo, los utensilios de cocina más originarios que puedas encontrar, el pilón y la cafetera de tetera para servir en jícaras el sabroso café criollo.
Y comienza el guateque!!!; todos a sus puestos: la orden viene de Edhit Miranda Vega, actual líder, además de verla con las clave en las manos ejecuta también la auténtica tumbandera, al lado con las maracas cartapila se encuentra Edgar Miranda Vega, quien también se le conoce como un gran cantor y compositor, a uno de los extremos con la tumbadora encontramos a Nigsel Miranda Vega, mientras Elio Alvares Tamayo porta la guitarra y también a la hora de cantar aporta la voz prima, como personaje pintoresco el cual disfruto mucho al verlo sentadito en la marímbula lo es Erasmo Rodríguez Carbonell, a su lado acompañándolo en la percusión con los bongoes encontramos a Clivian González Silva, al que también lo podemos escuchar en algunos cantos, mientras con el tres vemos a Yosbel Rodríguez Peña y como bailarina acompañada por Rublan Vargas Miranda, además de verla ejecutando al güiro encontramos a Mariela Rodríguez Miranda y a su lado su hija Rocío Violeta Martí Rodríguez con las maracas, integrante más joven de la familia con solo13 años de edad. En la actualidad la familia Miranda con su grupo representativo de “Raíces soneras” goza de un gran reconocimiento social y comunitario, sus vecinos los esperan en cuanto jolgorio se crea en la zona, encontrándolos en festejos del barrio, fiestas de santos o cumpleaños, sábados de Gloria, bodas, fin de año, entre otras celebraciones, como: Noche buena, jornadas Cucalambeana, entre otras. Es común encontrarlos en la Jornada Nacional Cucalambeana de Las Tunas, específicamente en el área que ocupa el popular “Bohío campesino” en la sede del Cornito, además ha sido invitada a participar en ediciones de la Fiesta de la Cubanía en Bayamo, Granma, el Festival del Caribe en Santiago de Cuba y la Feria Nacional de Arte Popular en Ciego de Ávila.
Entre tantos reconocimientos; ostentan el Premio Nacional Memoria Viva y la Distinción del “Laúd Tunero”. Sin duda, estamos en presencia de una joya que atesora el Patrimonio Cultural de la Nación; “Raíces Soneras” constituye uno de esos grupos portadores representativos de la cultura cubana, defensores ultranza del son montuno, el nengón y el sucu-sucu, su legado los hace distintivo de una impronta imperecedera e inigualable para todos los cubanos, la cultura cubana siempre agradecida por el valor incalculable que se han ganado tejiendo cada historia por generaciones.
Muchas Felicidades
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