En la mañana de este lunes comenzó la XIII edición del Encuentro de Jóvenes Escritores de Iberoamérica en el Centro Cultural Dulce María Loynaz (CCDML), dedicada a los 75 años —que cumplirá el próximo 20 de septiembre— del poeta, ensayista, profesor, editor e ilustrador Roberto Manzano, y al décimo aniversario de la desaparición física de la joven poeta venezolana Caneo Arguinzones.

Un diálogo de lujo fue moderado por la poeta, promotora y gestora cultural, Yanelys Encinosa Cabrera, este 19 de febrero. Los panelistas Yasel Toledo Garnache, escritor, director de El Caimán Barbudo y presidente de la Asociación Hermanos Saíz (AHS), Tomasa González, directora del CCDML, Josué Pérez Rodríguez, vicepresidente del Instituto Cubano del Libro y Sinecio Verdecia Díaz, director de la Casa de la Poesía, desarrollaron el debate.

En su intervención, Encinosa —fundadora del evento y especialista de Literatura de la Oficina del Historiador de la Ciudad— resaltó «el valor de inaugurarlo aquí, en la casa donde por medio siglo habitara nuestra única mujer Premio Cervantes de Literatura». Con ello, cedió la palabra a Tomasa González, actual directora de la institución, quien habló sobre el significado que tiene para ella trabajar en el sitio donde por tantos años la Loynaz caminó y creó su obra.

El Encuentro de Jóvenes es una cita cultural que ha albergado en su seno a muchísimos miembros de la AHS, organización que facilita y garantiza la participación de la juventud artística del país en este evento. Toledo Garnache, su presidente, ratificó el valor inconmensurable que se le da a la creación artístico literaria en nuestro país: «No es casual que la AHS tenga cinco editoriales y varios eventos dedicados a la literatura con sus respectivos concursos para impulsar la escritura creativa».

Josué Pérez Rodríguez, vicepresidente del Instituto Cubano del Libro y quien también fuese director del CCDML, habló sobre la pureza y el espíritu inaudito del encuentro, al cual catalogó de los más felices precisamente por su lozanía y entusiasmo. «Es algo que no existe en otro país y la feria le da la oportunidad de que transite por otras instituciones culturales cubanas como la Casa de las Américas, la Casa de la Poesía».

En otro orden de asuntos, Pérez Rodríguez conversó sobre cómo las inteligencias artificiales influyen en el mundo editorial e instó a los poetas extranjeros a disfrutar de esta fiesta literaria en toda su dimensión.

Sinecio Verdecia, poeta y performer, realizó un merecido homenaje a Roberto Manzano, promotor cultural, poeta excepcional y a quien la mayoría de los jóvenes escritores cubanos tienen como un apóstol de la palabra, de la humildad, de la sencillez, del cariño. Maestro del verso y maestro del camino, Roberto Manzano Díaz es un hombre extremadamente espiritual que ha hecho de la poesía su fe y proyecto de vida.

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Tomado de El Cañonazo, no. 5 del 20 de febrero