Entre el 1ro de marzo y el 30 de abril se extiende la convocatoria de entrega de obras para una nueva edición del concurso de composición e interpretación Adolfo Guzmán.

Reconocido como el evento por excelencia de la canción cubana y en digno homenaje a uno de los grandes exponentes del género en la Isla, regresa este certamen antológico cuyas obras triunfadoras —incluso solo las participantes— forman parte de la banda sonora de varias generaciones de cubanos.

Para la ocasión, la televisión y la radio de casa, junto al Instituto cubano de la Música y la Asociación de Músicos de la Uneac han unido esfuerzos en favor de la realización de un evento que ha marcado época en la mayor de las Antillas. Obras inéditas —condición indispensable para ser aceptadas— conformarán un arsenal de buen gusto y rigor que asumirán el reto de “prender” en el gusto popular, aun cuando no es secreto para nadie que no es la canción el género de las multitudes, en tiempos de tanta (con)fusión.

Baste recordar temas como, “Canción eterna de la juventud”, de Marta Valdés, la primera ganadora del certamen; “Para Bárbara”, “Tú eres la música que tengo que cantar” , “Mujer si la distancia es esa huella”, “Amar, vivir”, “ Decirte cosas de amor”, son solo meros ejemplos para asentir en lo alto que históricamente se movió la canción cubana en este concurso.

Hoy en momentos en que las metáforas a veces se convierten en imágenes ilegibles, donde la canción de autor —como gustan muchos llamarles— en busca de alto vuelo no siempre llega a destino cierto, o los facilismos se convierten en comodines para captar la atención, el Concurso Adolfo Guzmán apuesta por sortear obstáculos y hacer prevalecer canciones que puedan llegar a la mayoría con fineza, respeto y rigor.

De eso se trata, un país que ha dado tan bellas letras y valiosos cultores no puede dejar morir un evento de ese tipo. Un concurso que coloca a reconocidos y noveles ante la posibilidad de crear temas que hablen de amor y desamor, ventura y dolor, vida y odio, siempre con la certeza de que el saldo que queda es el merecido aplauso por lo que se dice y se siente, y cómo se dice y se siente.

El concurso queda abierto a todas las variantes de la canción. Las maquetas se entregarán en las emisoras de radio y canales de televisión provinciales o, directamente, a la Dirección de Comunicación de la televisión, sita en el segundo piso del mezzanine del Edificio del ICRT. Las maquetas en soporte digital, acompañadas de la letra y los datos generales del autor (nombre, carnet de identidad, dirección y teléfonos de localización) en un sobre sellado identificado con un seudónimo. El jurado, pieza esencial dentro de la concepción del espectáculo, estará integrado por prestigiosas personalidades que seleccionarán las obras finalistas, los orquestadores, arreglistas e intérpretes en cada caso. Como es ya habitual se tratará de veinticuatro piezas de todo el país.

Se entregarán junto al Gran Premio, los de orquestación, interpretación, y el de la popularidad. Rescatar la visión histórica que se tiene del evento, defender la idea de que ante nuevas exigencias y gustos, ha de corresponder un discurso audiovisual acorde, incluso, maneras otras de expresión, serían estos puntos a seguir muy de cerca; pero todo dependerá de la recepción misma de las obras. Ellas, como plato fuerte del concurso, mostrarán el camino más seguro en cuanto a cómo recrearlas.

La dirección musical en manos del Premio Nacional de Televisión, Miguel Patterson, el guion corre a cargo de Caridad Rojas. Como directores de televisión, Orlando Cruzata, Hisandra Maury y Ana María Rabasa asumirán las galas de cada noche, dedicadas al cine cubano, en ocasión del nacimiento 65 del Icaic y Casa de las Américas respectivamente. Celebrar el Día de la cultura nacional quedará bajo la égida de Ana Rabasa, mientras la jornada final y gran noche de premiaciones será dirigida por Danilo Sirio, e incluirá un homenaje al cantautor Silvio Rodríguez.

Cuatro fines de semana de noviembre en que se aspira a que Cuba viva la canción. Veinticuatro obras finalistas que lucharán por llevarse un premio codiciado porque es portador en sí de gran parte de nuestra identidad como nación.

Por acá seguiremos ofreciendo detalles de esta gran fiesta de la canción que retoma el rumbo en la radio y televisión nacionales.