Otra mirada al paisaje propone Alejandro Jurado en su expo Solsticio, en galería Galiano. Sus obras expresan una fascinación por este fenómeno astronómico que representa desde la descomposición abstracta del color.

No podemos dejar de mencionar que para este artista su arte es un testamento de imágenes y sonidos, lo que denota una de las creaciones abstractas más personales e íntimas de los artistas contemporáneos. En una relación entre el Space Art y los paisajes abstractos, Solsticio es la representación de escenas que parten del fenómeno real astronómico, llevadas al lienzo, no desde el más frío concepto, sino desde la explosión de emociones y sentimientos, trasmitidas con el más bello derroche. Es una mirada personal hacia la astronomía, el espacio y a lo desconocido.

Variada en colores, técnicas, formatos e incluso, en montaje, Solsticio es un “banquete” desde la visualidad de tonos y texturas. Los que conocemos la obra de Alejandro Jurado disfrutamos mucho de su juego de pinceles, de luces, del empaste; este último un poco ausente en esta exhibición, pues en la mayoría de las obras los colores son más planos que en otras ocasiones.

El paisaje, para el artista, se aleja de lo clásico y tradicional para convertirse en su visión testimonial y retiniana, acompañada de la música latente y que da título a muchas de sus piezas. Si se quiere, es un pretexto para el estudio del color, y si nos reencontramos con la profundidad, hay una búsqueda filosófica de encontrar respuestas lógicas en lo desconocido: el universo.

En palabras del catálogo: “En estas obras Alejandro Jurado observa, recrea y nos regala una nueva manera de visualizar las maravillas del espacio exterior”.

Será hasta marzo la cita para disfrutar en galería Galiano de un derroche retiniano del color. Con esta muestra, este joven creador sigue demostrando que conoce muy bien la técnica de la abstracción y, en esta oportunidad, de un modo sorprendente, nos lleva a la apreciación de un cosmos que nos rebasa.

Exposición Solsticio, de Alejandro Jurado. Foto: Maité Fernández Barroso