En medio de una restauración capital sin precedentes para el inmueble, el teatro La Caridad de Santa Clara arriba hoy al aniversario 137 de su fundación.

Sin abandonar la vida cultural dentro la institución, que no pretende cerrar sus puertas al público en ningún momento, 10 brigadas especializadas del Fondo Cubano de Bienes Culturales (FBC) intervienen las diferentes áreas del edificio, con el objetivo de rescatar sus valores originales.

Domingo Ravelo Rodríguez, inversionista a cargo de la obra, declaró a la prensa que el proceso de restauración se realiza desde las partes superior y exterior hacia las inferior e interior, con atención en la carpintería de madera, cubierta de tejas, falsos techos, tabloncillos, mobiliario y murales.

Explicó que luego de un levantamiento patológico general y por secciones, pudo constatarse el alto nivel de deterioro de la edificación, en el que se ha ido profundizando a medida que avanzan los trabajos, pues no se disponía de proyectos estructurales anteriores.

En estos momentos, precisó, se labora, además, en la eliminación del comején en las maderas, así como en la conservación de los elementos originales, solo sustituyendo por similares aquellos irreversiblemente dañados.

La intervención en este teatro, fundado en 1885, ha representado un reto tremendo para cada uno de los implicados, al tratarse de una obra con grado de protección uno, alta presencia de elementos de madera y piezas de un gran valor patrimonial, destacó el inversionista.

Ravelo Rodríguez informó también que ya intercambian con una firma especializada en equipos de clima, a fin de asegurar una ventilación no invasiva dentro del edificio.

Por su parte, Ernesto Alejo, director de la institución, catalogó los trabajos dentro del teatro como una obra de infinito amor, que persigue salvar la joya más importante de la arquitectura santaclareña, y presentó dos nuevas piezas –cortesía del grupo Albus del FBC– que se suman a los elementos patrimoniales de la instalación: el libro de firmas y el taburete donde se presentó por última vez en La Caridad el Acuarelista de la Poesía Antillana, Luis Carbonell.

Rainer Albas Morales y Riddier Rodríguez Morales, a cargo de la ejecución de estas piezas, reconocieron que se trató de un proceso de creación artística basado en los elementos históricos de la edificación, acorde con su belleza y antigüedad.

Aunque la restauración capital del teatro La Caridad, iniciada el 4 de noviembre del 2021, aún no marca una fecha concreta para su acabado, se pretende culminar, en lo que queda de año, la sección de la entrada y las salas Marta Abreu y de ensayos.

El inmueble –fundado el 8 de septiembre de 1885, bajo el amparo de la benefactora de Santa Clara Marta Abreu– ostenta la condición de Monumento Nacional y deviene uno de los tres teatros cubanos erigidos en el siglo XIX, junto al Sauto de Matanzas y el Tomás Terry de Cienfuegos.