La Cátedra de Danza del Ballet Nacional de Cuba (BNC), bajo la dirección general de Viengsay Valdés, convoca a estudiantes y bailarines a un Programa Didáctico, del 30 de octubre al 3 de noviembre venidero.
La acción educativa, que incluye cursos, charlas y clases magistrales, se inserta en la agenda de actividades del XXVIII Festival Internacional de Ballet de La Habana Alicia Alonso, a celebrarse del 28 de octubre al 10 de noviembre, según la página en Facebook del BNC.
El programa brinda la oportunidad de perfeccionar conocimientos con la técnica, el estilo y los conceptos interpretativos de la Escuela Cubana de Ballet.
El cupo de matrícula es limitado y los interesados tienen la posibilidad de enviar su solicitud hasta el 15 de octubre, fecha en que cierran las inscripciones.
Los participantes deben viajar con visa de turista hasta 30 días, y un seguro médico autorizado en Cuba.
De acuerdo con la convocatoria, se entregarán certificados acreditativos y el costo del programa es de 360 dólares.
Este intercambio permite tomar clases de ballet de dos horas de duración, por cinco días, con profesores invitados al Festival y tres entradas exentas de pago para asistir a las funciones del prestigioso evento danzario.
A las clases magistrales, charlas y conferencias asistirán en calidad de invitados destacadas personalidades de la expresión como Viengsay Valdés, Miguel Cabrera, Víctor Gilí, Esnel Ramos y José Manuel Carreño (Cuba) y Azari Plisetski (Rusia).
Es esta una oportunidad de nutrirse de la sabia de iconos de la danza, quienes compartirán sus experiencias profesionales en un proceso rico en enseñanza y aprendizaje, añade el texto del BNC.
La importante cita danzaria se prestigia este año con la participación de bailarines y coreógrafos de más de 15 países. Destaca entre esas figuras la mexicana Elisa Carrillo, los españoles Lucía Lacarra y Joaquín de Luz, el brasileño Marcelo Gomes, la francesa Mathilde Froustey, el portugués António Casalinho y los rusos Daniil Simkin y Semyon Chundin.
Una de las atracciones del festival radica en la temporada de El lago de los cisnes, un clásico que el público agradece pues no se baila en Cuba de manera completa desde 2018, y que dedicará una de sus funciones al maestro Julio Bocca.
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