A encantarse con nuevas piezas adquiridas recientemente por el Museo Nacional de Artes Dec

orativas de La Habana, nos invita la muestra titulada Buenas Nuevas, disponible este mes de enero en las plataformas digitales de la institución. 

Con curaduría y fotografías del Msc. Yosvanis Fornaris Garcell, actual director del museo, la exposición acoge algunos vasos que integran un importante lote de obras de arte, superior al centenar, adquirido por el museo y que pertenecen a diversas épocas y regiones, en su gran mayoría a la asiática, concretamente china. 

A través de este trabajo disfrutamos de dos vasos de porcelana de esmaltes azul y blanco procedentes de los hornos de la ciudad de Jingdezhen, producidas durante el período Guangxu (1875-1908). 

Las piezas con una exquisita confección son testimonio del delicado trazado y la maestría de los artesanos chinos, quienes eran expertos en la pintura cerámica y se inspiraban para sus creaciones de las fuentes primigenias de obras plásticas o la literatura, que detentaban una fuerte tradición. 

Según señala el texto de la exposición, escrito por el propio Fornaris: “a finales de la dinastía Qing (1644-1911) la producción de porcelana comenzó a imitar los años de esplendor de este arte durante el siglo XVIII. También destaca el experto que las formas de estos contenedores, en su mayoría, tienen un origen en los bronces antiguos chinos”. 

Otro elemento característico de estas piezas es que en su representación contienen figuras mitológicas tales como el dragón, las quimeras, los caballos que galopan sobre el mar, etc., y que son íconos de constante representación en el arte de esa nación en general. 

El Museo Nacional de Artes Decorativas de Cuba (MNAD), se inauguró el 24 de julio de 1964, en la otrora mansión Gómez Mena, con la colección de la condesa, y a la cual posteriormente se le fueron sumando otras por transferencias, compras y donativos. 

Esta institución se enorgullece de atesorar la más valiosa colección de artes decorativas y aplicadas de Cuba y comprende los más diversos objetos, tales como muebles, lámparas, elementos del vestuario, vajillas y relojes procedentes de los reinados de Luis XV, Luis XVI y Napoleón III, así como piezas orientales de los siglos XVI al XX. 

También se exhiben obras de las importantes manufacturas francesas Sèvres, París, Chantilly y Limoges y, de las inglesas: Derby, Chelsea, Wedgwood, Worcester y Staffordshire. 

Su colección destaca en el ámbito latinoamericano y mundial por la excelencia de los materiales: porcelana, cristal, madera, metal y piedras semipreciosas; así como por el excelente trabajo técnico artístico realizado por los creadores de las piezas.