Colores, temperas, crayolas, cartulinas, papeles, figuras geométricas… todo sirvió para que niños y niñas adornaran un hermoso árbol infantil durante el Taller de artes plásticas El árbol de la vida, realizado en la sala Che Guevara de la Casa de las Américas como cierre de la temporada de verano Va Por La Casa.

Armados con sus tijeras, lápices, pinceles, gomas de pegar, chinchetas y mucha imaginación y creatividad, una decena de pequeños talleristas y sus padres decoraron el objeto dispuesto por los especialistas de la institución.

Además, a través de imágenes y videos, apreciaron y escucharon las míticas historias que encierra este símbolo, construido de forma artesanal en México como parte de tradiciones familiares.

La idea inicial era acercar a los niños a un tema continental, así como mostrarles la variedad de formas, tamaños y figuras que porta este referente de la región, a partir del propio Árbol de la Vida que tiene la Casa de las Américas, obra del artista mexicano Alfonso Soteno.

«Durante la actividad también les mostramos otros árboles, los cuales pertenecen a la colección Arte de Nuestra América Haydee Santamaría», explicó Silvia Llanes, directora de Artes Plásticas. 

«De esta forma, queríamos que los pequeños insertaran en el árbol infantil elementos relacionados con sus recuerdos, sus juegos y sus vidas, y superaron nuestras expectativas», agregó la estudiosa del arte latinoamericano.

Banderas, erizos, estrellas, sirenas, corazones, soles, animalitos, flores y figuras humanas el árbol infantil, que se expondrá de manera permanente en la sala de lectura de la Casa de las Américas.

Además de fomentar la educación artística en un entorno creado para la recreación sana, los diferentes talleres ofrecidos durante la temporada de verano posibilitaron la visita de muchos infantes, adolescentes y jóvenes, que descubrieron la multiplicidad de valores culturales reunidos en las colecciones de la Casa.