Las jornadas de la trigésimo segunda Feria Internacional del Libro dejaron en la Casa de las Américas nuevas relaciones editoriales, alianzas y motivaciones compartidas entre Cuba y distintas regiones de Latinoamérica y el Caribe. Entre los disímiles encuentros, tuvo lugar la presentación de la revista mexicana Memoria, publicación principal del Centro de Estudios del Movimiento Obrero y Socialista (CEMOS) en el vecino país.
Jaime Ortega Reyna, director editorial de la revista y Gerardo de la Fuente, investigador de la Universidad Autónoma de México y director del CEMOS, detallaron el acometido histórico de la publicación: desde su origen en 1983 como boletín del Archivo del Partido Comunista Mexicano hasta las coyunturas actuales que ha vivido. En principio, el CEMOS, entidad que acuna la revista, tiene entre sus objetivos clave, resguardar el archivo histórico de los movimientos de izquierda en México así como revitalizar y contribuir al debate político de nuestros días. Para ello, una revista como Memoria, la más antigua en la tradición periodística de la izquierda mexicana, significa la intervención en la política cultural del país a través de la recuperación del patrimonio documental, pero también, del dialogo directo, crítico y transformador, con las diferentes prácticas gubernamentales.
Hacer memoria, como misión primordial de la revista, no es simplemente una tarea museológica, se configura como un necesario ejercicio político. Frente a las difíciles coyunturas atravesadas por el país en los años previos al mandato de Andrés Manuel López Obrador, manifiestas, por ejemplo, en la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa durante el 2014; resurgió con mayor fuerza la necesidad de recuperar y visitar aquellas alternativas de lucha de los movimientos obreros y socialistas. En este sentido, el papel del Partido Comunista Mexicano, activo desde 1919 hasta 1980, integra esa memoria política y cultural que el Centro de Estudios visibiliza en sus catálogos.
El fondo de archivos del Partido Comunista, al que luego se sumaría la documentación del posterior Partido Socialista Unificado de México, resguardado durante finales del siglo XX por el pintor, político y militante Arnoldo Martínez Verdugo; ha sido el eje central de la labor del CEMOS. Como bien explicara Gerardo de la Fuente, México no sería comprensible sin la existencia e impronta del Partido Comunista, al que pertenecieron figuras como los artistas Diego Rivera, Frida Kahlo o Alfaro Siqueiros. La lucha comunista influyó en los procesos de guerrilla existentes en el país durante los años 50´, aunó juventudes en torno a las ideas progresistas de emancipación obrera y fue un puente en las relaciones con la Revolución cubana y los movimientos de izquierda en Latinoamérica.
De esta etapa en la historia mexicana, el CEMOS resguarda archivos de dirigentes políticos sindicales, colecciones de obras, folletos y documentos de organizaciones como la Liga de Escritores y Artistas (LEAR, 1929-1959) además de un amplio patrimonio que abarca la fotografía y el cartel. Como parte de la labor del CEMOS y, en palabras de sus principales coordinadores, por su amplia trayectoria nacional e internacional y por el enfoque sistemático y libre de los grandes temas socioeconómicos, políticos y culturales de la actualidad, Memoria, es una de las principales revistas latinoamericanas; que continúa el debate en torno las temáticas relacionadas con México, América Latina, las emergencias feministas, el pensamiento crítico y la recuperación de la historia.
Por demás, junto con Memoria, en el archivo del CEMOS se hallan catálogos de otras publicaciones periódicas del Continente en el que destacan las cubanas Pensamiento Crítico, Bohemia y la propia revista Casa de las Américas; lo que da cuenta de la importancia del resguardo del patrimonio no solo a nivel nacional, sino regional. Como parte del intercambio de un aval histórico compartido, en la Casa quedaron números significativos de la revista mexicana, así como otros títulos publicados por las editoriales del CEMOS.
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