Lisboa, 17 de mayo de 2017. El artista cubano Carlos Garaicoa inauguró ayer su exposición Yo nunca he sido surrealista hasta el día de hoy, en el Museo de Arte, Arquitectura y Tecnología (MAAT) de Lisboa.

La obra, cuya maqueta el artista diseñó en 2008, es la de mayor dimensión realizada por Carlos Garaicoa y ocupa los 800 metros cuadrados de la gigantesca Galería Oval del museo, espacio para la cual fue concebida. Reproduce, a escala real, un jardín con plantas, luminarias públicas, semáforos y otros elementos urbanos donde el público puede transitar e interactuar.

"Las lámparas están todo el tiempo respirando, se encienden y se apagan, respiran casi como un cuerpo humano. Es la luz en constante ritmo, en constante movimiento. He intentado convertir el museo en un cuerpo vivo", señaló el artista a la agencia de noticias EFE.

En declaraciones a la agencia Lusa, Inês Grosso, quien junto al Director del MAAT, Pedro Gadanho estuvieron a cargo de la curaduría, expresó: “la instalación une dimensiones claves en el trabajo del artista: luz, arquitectura, espacio urbano e imaginación poética. Por su parte, Gadanho se refirió a la forma en que esta instalación cuestiona la planificación urbana y la “propia cuestión de la sustentabilidad eléctrica” a través de una maqueta que es “casi una representación del futuro”.

La exposición estará expuesta del 17 de mayo al 18 de septiembre y forma parte de Feria de Arte Contemporáneo ARCOLisboa y de la programación de Lisboa, Capital Iberoamericana de la Cultura. A la inauguración de la instalación asistieron la Embajadora de Cuba Johana Tablada y la Tercera Secretaria Anabel Serrallonga. La muestra ha tenido amplia repercusión de prensa en Portugal y en medios especializados internacionales.

Carlos Garaicoa estudió en el Instituto Superior de Arte (ISA), La Habana, de 1989 a 1994. Tiene una obra compuesta por instalaciones, dibujos, videos, fotografías y esculturas con la que ha participado en númerosos certámenes internacionales y ganado múltiples premios.

El MAAT, ubicado a la orilla del río Tejo en Lisboa, fue inaugurado en el año 2016, recibió el premio The Design Prize 2017., organizado por las revistas Abitare y Designboom y fue finalista  en el Premio de Arquitectura Contemporánea de la Unión Europea Mies van der Rohe 2017.