La primera ciudad colonial hispana de Cuba, Nuestra Señora de la Asunción de Baracoa, fundada en 1511, ha tenido en su historiador  y conservador el Maestro en Ciencias Alejandro Hartman Matos un perseverante defensor de su cultura, particularmente un estudioso de nuestra primigenia  raíz aruaca, amorosamente atesorada y practicada por los descendientes de aquellos cubanos y cubanas originarios en ese territorio. ¡Vaya hasta él nuestra felicitación más sincera por su 75 cumpleaños en el día 30 de marzo!

La cuna de la cultura hispano cubana en Cuba, fruto de la época colonial española, mezcló para siempre en lo cubano la milenaria raíz primigenia aruaca y las otras que llegaron más recientemente, hace solamente cinco centurias, desde otras partes del planeta unidas a las migraciones europea, africana y asiática.  

La creación de la Red de Oficinas de Conservación de las ciudades históricas es un gran acierto de la política cultural de Cuba,  con vistas a la defensa y protección de esta parte del patrimonio cultural urbano; fue presidida inicialmente por el doctor Eusebio Leal Spengler, cuya sabiduría se verificó una vez más en esta iniciativa hecha realidad. 

Baracoa, no obstante ser la más antigua de nuestras ciudades hispano cubanas, se incorporó recientemente a dicha Red, que aúna los conocimientos y experiencias de los conservadores de las ocho ciudades históricas más antiguas del país. Justamente se designó como vicepresidente de la nueva institución, de subordinación nacional,  al MSC Alejandro Hartman.  

La oficina baracoesa todavía está en proceso de reconstrucción, pero,  por su necesidad para el desarrollo del trabajo cultural, educacional y turístico en este sitio estratégico, debe atenderse con prioridad su ejecución y pronta apertura. La calidad del esfuerzo histórico cultural,que durante varias décadas ha distinguido a la Ciudad Primaday sus evidentes resultados, así lo requiere y merece.