El joven actor cubano Alfredo Reyes participará en el Festival de Teatro  Todos por una voz, en Miami, del primero al 28 de febrero próximo, con el monólogo Elogio del barrendero, de Manuel Martínez.

Esa obra se presenta el próximo fin  de semana, de viernes a domingo, en la Sala Osvaldo Dragún del complejo Cultural Raquel Revuelta, en esta capital.

En declaraciones exclusivas a la AIN, Reyes informó que participará invitado por los organizadores del evento, que patrocina la compañía Habana Fama.

Esa pieza le ha merecido el Premio Especial del Jurado  Catina Vera, el otorgado por el público en el  Festival  Otoño azul, en  Buenos Aires , Argentina, el Tercer Premio de actuación del Festival Pequeño Formato del Mejunje en   Santa Clara y el de Actuación en el  Festival   Teatrales de invierno, en Cuba.

Estrenado en el teatro del Museo Nacional de Bellas Artes en 2006, Reyes confiesa que era algo similar a lo que ahora ofrece, porque en aquella ocasión estaba muy inmaduro y al entrar al grupo Teatro de Bolsillo, que dirige Rigoberto Luaces, este le exigió mucho acerca del texto.

Eso complementó su formación muy física, adscripta a la Escuela de Eugenio Barba y los entrenamientos con Flora Lauten y Antonia Fernández.

Ahora, dice que  es un trabajo más integral en el que se entrega con la mayor pasión del mundo en busca de la paz y la amistad.

Comenzó su carrera con José Milían y su Pequeño Teatro de La Habana, con quien protagonizó Las mariposas caen al vacío, Mágony, La pequeña defensa de los enterradores y participó en casi todo el repertorio del grupo entre los años 1995-98.

Entre agosto y septiembre del año anterior protagonizó El pagador de promesas, del brasileño Alfredo Dias Gomes, con la compañía de La Ginesta, en la ciudad italiana de Cosenza, dirigida por Dante de Rose, toda en idioma italiano y que se presentó en  varias ciudades como Rende, Milán, Bologna y Roma.

Después de las actuaciones en Miami irá a Nueva York para protagonizar El pagador de promesas, entre marzo y abril, con la Compañía de La Ginesta.