Arropada por las montañas y el mar, la actual ciudad de Santiago de Cuba fue una de las siete villas que el adelantado español Diego Velázquez fundó en Cuba para colonizar la Isla. El sitio primigenio del núcleo poblacional se localiza en el actual Parque Céspedes, desde donde creció la localidad en forma de círculos concéntricos hasta chocar con las faldas de la Sierra Maestra y las aguas del Mar Caribe.
Esa forma de desarrollo urbanístico llevó a que especialistas de la Oficina del Conservador de la Ciudad concibieran estratégicamente en forma de anillos el proyecto de rehabilitación integral, que en la actualidad atraviesa por una fase muy importante a propósito de la celebración este año, del aniversario 500 de la fundación de la que es considerada la segunda urbe en importancia en el país.
Hortensia Estrada, especialista de planeamiento urbano de la Oficina, explicó a Cubarte que el programa de intervención constructiva está concebido en tres anillos denominados Cero, Uno y Dos. El primero corresponde al área fundacional y se localiza en el parque Céspedes, antigua plaza de armas, donde confluyen edificaciones como el antiguo Ayuntamiento, el Hotel Casagranda, la Casa de Diego Velázquez o Museo de Ambiente Histórico y la Santa Basílica Metropolitana Iglesia Catedral, entre otras.
Los anillos Uno y Dos abarcan 9 y 18 manzanas, respectivamente, alrededor del parque Céspedes, donde se encuentran en distintas fases de intervención unos 300 edificios además de una docena de calles que son sometidas a un proceso de ambientación urbana.
La reanimación urbana comprende las acciones en fachadas fundamentalmente, entre ellas repello y pintura de paredes, y algunos arreglos de techos en primeros cuerpos y labores de carpintería. Esta reanimación beneficiará unas 500 viviendas, detalló la especialista.
Se trata de un ambicioso programa de rehabilitación patrimonial que incluye obras de gran calidad como el conocido Banco de Canadá, Museo Bacardí, Casa de la Trova, Casa del Queso, sede Artex, Museo del Carnaval e Iglesia Metodista, entre otros.
Durante 2015 otras instalaciones deben ser entregadas, entre ellas la Sala de Artes Decorativas antiguo Club San Carlos y la Iglesia Catedral, primera institución religiosa de su tipo en Cuba.
Estrada puntualizó que además de recuperar los ambientes históricos, para lo cual se continuarán realizando complejas obras constructivas, se aspira a la peatonalización de importantes tramos de los anillos fundacionales, en correspondencia con las tendencias actuales del urbanismo y como una medida para conservar las edificaciones, la mayoría de ellas con más de 100 años, y permitir un mejor disfrute de sus valores.
Es un trabajo ambicioso y que requerirá un acucioso trabajo multidisciplinario, pero que hará de Santiago de Cuba una ciudad saludable, bella, limpia, agregó la experta.
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