“(…) Hace un año durante la celebración del Aniversario 37 de nuestro Centro, y cuando aún no se avizoraba el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, el doctor Armando Hart Dávalos, con la visión política que lo define, escribió: Martí fue el pensador extranjero, quien mejor conoció la sociedad norteamericana de su tiempo, y sus ideas constituyen hoy una sólida base para relacionarnos con ese país”.
Con este recordatorio la doctora Ana Sánchez Collazo, directora del Centro de Estudios Martianos (CEM), inició su intervención con motivo de celebrarse el Aniversario 38 de dicha institución, donde prestigiosos investigadores —entre ellos, la escritora Fina García Marruz—, académicos, profesores y estudiantes (cubanos y extranjeros), le visitan siempre con el sano objetivo de la búsqueda y profundización en el conocimiento de uno de los más grandes hombres de nuestra América y del Guía Intelectual de una Revolución que ha trascendido y continúa trascendiendo fronteras, al ejemplificar en la práctica aquello de Patria es Humanidad.
A continuación la doctora Sánchez Collazo puntualizó en los resultados de trabajo del CEM hasta la fecha, entre ellos, la realización de aplicaciones para celulares a cargo de un colectivo de jóvenes informáticos, quienes han logrado trasladar a dichos soportes —entre otras exitosas acciones—, reseñas de los 25 tomos correspondientes a la Edición Crítica de las Obras Completas del Apóstol; la compilación de cuatro mil pensamientos martianos y de una iconografía martiana ampliada (ambas contenidas también en soporte móvil), y la creación de la Sección Actualidades en el Portal del CEM, inclusiva de las últimas diez noticias acontecidas en él.
A la vez la principal directiva del CEM destacó la creación de un grupo multidisciplinario, conducido por la doctora María Caridad Pacheco González, dedicado al tema José Martí y su visión sobre Estados Unidos de América a la luz del presente milenio.
Asimismo enfatizó en los nuevos retos que debe enfrentar el CEM en estos momentos y, en esencial, en los relacionados con problemas de carácter o subversión ideológica, dirigidos en lo fundamental hacia sectores de la intelectualidad cubana y jóvenes, tratando de sembrar la desconfianza y el pesimismo hacia la obra de la Revolución.
Por su parte el doctor Héctor Hernández Pardo, sub director de la Oficina del Programa Martiano, dio lectura a un mensaje del doctor Armando Hart Dávalos, en el cual reiteraba: “(…) Estamos viviendo tiempos muy complejos, para los cuales tenemos la responsabilidad de que las nuevas generaciones conozcan e interioricen en la Historia de Cuba. Martí fue el pensador extranjero, quien mejor conoció la sociedad norteamericana de su tiempo, y sus ideas constituyen hoy una sólida base para relacionarnos con ese país ahora y en los próximos días en que comenzará un largo y arduo proceso, tras el restablecimiento de las relaciones diplomáticas (…) Estudiar cada día a profundidad la vida y obra de nuestro José Martí y de nuestros próceres y libertadores resulta más necesario que nunca (…) A la vez que trabajar sistemáticamente en la Obra martiana, en especial, en lo referido al imperialismo y su actualidad”.
Finalmente, fueron reconocidos con rosas blancas y diplomas un grupo de trabajadores con una trayectoria de permanencia en el CEM de entre cinco y treinta y cinco años, entre los que se incluyó a su principal directiva, doctora Sánchez Collazo.
Una vez más, José Martí entre nosotros, como pensador revolucionario radical y cabal, y con la misión dirigida a todos (necesaria e impostergable), de contribuir a enaltecer y perpetuar la obra de la Revolución cubana. Así, propiciar una identificación de la juventud cubana con los sentimientos y valores martianos es palabra de orden en las circunstancias actuales, al constituir el legado de nuestro Héroe Nacional un referente ético, político e ideológico de trascendencia universal.
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