En el marco de la XXIV Feria Internacional del Libro de La Habana, el periódico digital Cubarte recogió impresiones de dos apreciados exponentes de la Cultura cubana; uno, el prestigioso compositor, guitarrista y director de orquesta, Leo Brower y el otro, el poeta, ensayista, investigador, editor y profesor Juan Nicolás Padrón.

Leo Brower:  “Luego del concierto para piano que realicé para el maestro y amigo pianista Chucho Valdés, preparé un cuarteto, y ahora concluí un concierto para un instrumento popular español, de origen árabe, y de unos ochocientos  años de historia: el bandura o bandurría —este último nombre como muchos le conocen—, hermano gemelo de la bandolina. Este concierto con dicho instrumento será estrenado próximamente por tres orquestas. En pocas palabras, estoy tratando de descentralizar el festival de cámara que estuvimos haciendo en Cuba hasta el pasado año, y lo estamos extendiendo a ocho ciudades del mundo.

En septiembre próximo, aquí en Cuba, estamos preparando un programa dedicado a la voz humana con los mejores cantantes del mundo,  extensivo a la mejor poesía, a la mejor música…Son todos amigos míos a quienes invito. Y estará dedicado al público cubano, a la Cultura cubana, a continuar enriqueciéndola y creando para ella. Siempre contaré con la Revolución cubana”.

Juan Nicolás Padrón: “En este contexto ferial cultural he realizado algunas actividades a petición de algunos escritores amigos. Entre ellas, con la talentosa poetisa chilena Mariné Zaldívar, quien me propuso la presentación de su libro de poemas “Décadas”, en el Centro Cultural Dulce María Loynaz —junto al crítico Virgilio López Lemus—; otra, la participación en la sede de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), en el panel literario dedicado a la poesía de Raúl Ferrer. Realizaré también la presentación de la poesía de los pueblos originarios de nuestra América, una magnífica antología del cubano Alex Pausides —y que nos pone en conocimiento de un tipo de poética que aún no se distingue por muchos de nosotros—; participaré también en varios encuentros-debates que se desarrollarán este sábado 21, en el Centro Cultural Dulce María Loynaz, relacionados con las revistas literarias, y en las cuales tradicionalmente Cuba ha tenido una gran presencia durante siglos. En torno a este tema estarán presentes un grupo de jóvenes con criterios muy fuertes al respecto. Asimismo y dentro de este contexto, la revista UNION presentó un artículo de mi autoría sobre el escritor chileno Nicanor Parra.

Es indudable que la Feria resulta un evento desbordante y es por ello que, en ocasiones, todas las expectativas te veces resultan cortas.”

Sobre su obra autoral en perspectiva afirmó que “tengo cuatro libros aún inéditos: dos, del género de poesía y dos de ensayo. Recientemente me informaron que tiene interés la Editorial Letras Cubanas en publicarme un libro de ensayos dedicado a la poesía cubana; tengo otro, también de ensayos, dedicado a igual género pero latinoamericano (posiblemente se lo proponga a la Editorial Arte y Literatura). Todos son proyectos.”

Al preguntar sobre qué observaciones hacerle a la poesía cubana actual, nos dice: “Cuba tiene un aval, un legado, una historia de poetas muy importantes y muy vinculados también al quehacer nacional, con la perspectiva del ser nacional. En mis cursos siempre trato de vincular el discurso que ofrece, que aporta la poesía a la manera de ser del cubano, de sus costumbres, de su ideario, de su proyección espiritual…Esto es sumamente importante en pueblos como el cubano, en pueblos jóvenes —porque nosotros somos un pueblo muy joven—, donde no se han perdido la definición y autodefinición del ser nacional. Lo digo, porque aquí es más que necesario, hay algunos que piensan que esto es algo viejo, y yo no creo así. Cuba tiene que pensar así para autodefinirse ante un vecino tan poderoso que ha tratado siempre de desnaturalizarte o desnacionalizarte para transformarte en una colonia, nueva neocolonia o algo distinto. Es por ello que siempre hay que ser muy coherente con lo que ha sido; con nuestra Historia y su legado, y la poesía ofrece informaciones que jamás las ofrecen, ni las ofrecerán las Ciencias Sociales, como tampoco ninguna otra disciplina del saber, porque te revela ángulos y zonas escondidas en las cuales tú puedes creer, latir un sentido, un sentimiento y una emoción capaz de ir mucho más allá de un conocimiento científico. “Al respecto y por su importancia, creo mucho en el ejemplo de la Poesía cubana y en la de algunos países latinoamericanos. Estos vínculos con nuestro continente y con nuestro quehacer nacional los llevo trabajando durante muchos años, y este es un asunto que muchos no ven o no quieren hacerlo. Generalmente se desentienden. Piensan que conocen la poesía cubana, sin realmente conocerla, y sin analizar sus vínculos con determinadas esferas de la historia de nuestro país”.