Cuba muestra este lunes un ambiente de festividad y optimismo renovado, al acoger las aulas a los estudiantes, ya vacunados contra la Covid-19, mientras a las terminales aéreas arriban numerosos viajeros y las instalaciones turísticas abren sus puertas para acoger a los turistas que llegan a la Isla para disfrutar de un Destino de paz y seguridad.

Desde el fin de semana las principales plazas de la capital y las provincias han sido escenarios de ferias  y presentaciones de artistas y músicos, como forma de expresar que existe confianza en el futuro y se siente el orgullo de contar con vacunas propias, y la convicción de que el camino de la recuperación de nuestro quehacer cotidiano está ahí, a la espera de que todos mancomunadamente hagamos posible un futuro mejor.

En la capital cubana, el fin de semana fue muy ilustrativo de que la vida cultural se reanima, y la Sentada protagonizada por los jóvenes en la parte vieja de la ciudad constituyó una colorida prueba, que sumó entre sus participantes al Presidente de la República Miguel Diaz-Canel, quien estuvo presente en esos festejos.

Recientemente el mandatario cubano dijo que “El reto de abrir las fronteras y de aceptar el arribo de familiares, turistas y la posibilidad de celebrar el fin de año y el aniversario del triunfo de la Revolución, tenemos que hacerlo con total responsabilidad para no retroceder”, en alusión a cómo la mayor de las Antillas ha logrado controlar la pandemia y avanza en la vacunación de su pueblo.

Y hacia esos desafíos marchamos, con la certeza de que vamos a  vencer nuevos rumbos y apremios, no habrá forma de detener el avance a pesar de los esfuerzos de algunos, aliados al imperio, que desean mover los cimientos del proyecto social cubano.

Tenemos el derecho a la vida, a recuperarnos tras casi dos años del azote de la pandemia. Cuba vive y hay motivos para el optimismo.