Presidida por Inés María Chapman Waug, viceprimera ministra de la república, se celebró en la Sala Rubén Martínez Villena, de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), un acto de recordación al aniversario 210 de la sublevación de José Antonio Aponte Ulabarra y su muerte a manos del colonialismo español en 1812.

Acompañaron a la dirigente gubernamental, el ministro de Cultura Alpidio Alonso Grau, el presidente de la UNEAC Luis Morlote Rivas, el presidente de la Asociación de amistad de Cuba con los pueblos africanos Víctor Dreke y el presidente de honor de la UNEAC y presidente de la Fundación Fernando Ortiz, Miguel Barnet Lanza, entre otros dirigentes e intelectuales cubanos.

Pedro de la Hoz González, vicepresidente de la UNEAC y presidente de la Comisión Aponte abordó el legado del héroe que sirve de paradigma al actual Programa Nacional contra el racismo y la discriminación racial en Cuba. Fotos: Cortesía del autor

El violinista Alejandro Oliva Figueredo interpretó “La bella cubana” de Eduardo Sánchez de Fuentes, iniciando la actividad. El historiador Luis Fidel Acosta Machado, profesor de la Universidad de La Habana, se refirió en sus palabras a la autenticidad del movimiento organizado por Aponte y su inserción en el contexto libertario que por entonces se respiraba en el continente americano y Pedro de la Hoz González, vicepresidente de la UNEAC y presidente de la Comisión Aponte abordó el legado del héroe que sirve de paradigma al actual Programa Nacional contra el racismo y la discriminación racial en Cuba.

Miguel Barnet además de sus reflexivas palabras brotadas de lo más profundo de sus sentimientos, leyó su poema Ebbó para los esclavos y el maestro Justo Pelladito, en el año en que arriba a sus 80 de edad y 65 de vida artística, hizo gala de virtuosismo y profesionalidad, junto a su grupo Afroamérica.

José Antonio Aponte dirigió un proceso de sublevaciones en varias regiones del occidente, centro y oriente del país contra el colonialismo español y la abolición de la esclavitud, en un proceso político-militar y de reivindicación social que se considera el primero de carácter nacional en la historia de Cuba, entre el 15 de enero y el 9 de abril de 1812.

Los cubanos y cubanas de hoy rinden homenaje a este precursor de las luchas independentistas del pueblo cubano, en una Jornada Conmemorativa que se ha denominado Aponte 210.