El fracaso de la Película del Sábado


el-fracaso-de-la-pelicula-del-sabado

Recuerdo con la nostalgia del buen cinéfilo, aquellos años de fines de la década de los setenta, cuando el doctor Mario Rodríguez Alemán ideó el espacio en la televisión cubana que todavía se llama “La película del sábado”.

Vimos entonces algunos filmes que ciertamente calificaban como cine “de entretenimiento”, porque podían ser vistos —y disfrutados— por un público amplio, y eran filmes que comunicaban eficazmente una historia a esa amplia teleaudiencia pero que, a la vez, eran cintas donde lo interesante no echaba a un lado lo importante.

En su mayoría películas muy bien realizadas, abordando asuntos de gran interés pasaron entonces por las pantallas cubanas.

Recuerdo que el espacio se inauguró con una cinta norteamericana, dirigida por el ya desaparecido Sidney Pollack, uno de los mejores directores estadounidenses de ese cuarto final del siglo XX.

La película era Los tres días del cóndor, con Robert Redford y Faye Dunaway y, para los que vimos y disfrutamos el cine del sueco Ingmar Bergman, fue noticia descubrir en el filme a Max Von Sydow, una de las estrellas bergmanianas, caracterizando en Los tres…, a un peligroso asesino al servicio de la CIA.

De Sydney Pollack fueron alguna de las joyas del cine de esos años como Tootsie, con Dustin Hoffman; Africa mía, también con Redford y Meryl Streep, y Nuestros años felices, con Barbra Streisand.

En “La película del sábado” se estrenó Kramer contra Kramer, con Hoffman y una Meryl Streep debutando en el cine.

Digo esto para subrayar cómo se ha empobrecido esa emisión, que fue una de las más importantes de la televisión cubana para presentar películas.

Desde hace ya algunos años, “La película del sábado” empezó a ofrecer trepidantes y vacías películas de acción de cualquier nacionalidad y de muy baja calidad.

El argumento que quería explicar esa programación era que, “La película del sábado” ofrecía un cine acción que era especialmente demandado por los jóvenes cubanos. Ese razonamiento hacía aún más absurda la permanente selección de películas por las que desfilaba una interminable cadena de escenas de violencia en filmes en los que el argumento se desvanecía, porque eso parecía no importarles casi nada a sus realizadores.

Es verdad que abunda el mal cine en los tiempos que corren pero, entre la producción actual y muchos grandes filmes de todos los tiempos que nunca han desfilado por nuestra televisión, hay material de sobra para ofrecer a los televidentes cubanos, una entrega digna y de calidad.

Creo que, quien piense que es ese el cine que prefieren los jóvenes cubanos, los está subvalorando totalmente. Hay cine de acción infinitamente mejor al que Cubavisión exhibe el sábado en la noche. Pero, ese horario, no creo que sea precisamente el que reúna a los jóvenes para mirar televisión. Podía ocurrir alguna noche de sábado, pero esa noche, cada semana, los jóvenes prefieren salir, reunirse, bailar o ir al cine, pero rara vez se sientan a ver la televisión.

Esa programación cinematográfica en la televisión cubana, debiera dirigirse a un público adulto, mayor —el que ve la tele los sábados en la noche— que va a seguir la cita si la oferta realmente lo merece, como hacía en aquellos años, cuando el amigo Mario Rodríguez Alemán escogía y presentaba “La película del sábado”.


0 comentarios

Deje un comentario



v5.1 ©2019
Desarrollado por Cubarte