Demostrar la evolución e importancia del arte del retrato en la Gran Bretaña del siglo XVIII, es el propósito fundamental de la exposición que, a partir de este viernes 16 de febrero, puede ser visitada en el Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA).
Con una curaduría de Carlos Fernández, la muestra está compuesta por dieciocho obras pertenecientes a la Colección de Pintura de Gran Bretaña del MNBA, una de las más interesantes con que cuenta la institución, debido a lo homogénea de su calidad, la cantidad de piezas y la representatividad que tienen en ella los artistas de esa nación, señaló el especialista.
En un encuentro con la prensa, indicó la intención didáctica con que desarrolló el proyecto, en el cual trata de poner de relieve el modo en que el retrato dignifica a la tardíamente aparecida Escuela de Pintura Británica, constituyendo además su principal aporte a la Historia del Arte.
En tal sentido, destacó el modo en que los retratistas ingleses asimilaron las experiencias de los grandes maestros italianos, flamencos, holandeses y franceses, logrando un estilo muy singular, el cual trascendió las fronteras nacionales, influyendo en Europa hasta el siglo XX.
Explicó que la exposición, titulada El rostro inglés. El cambio en el retrato del siglo XVIII está estructurada de manera cronológica, a partir de la primera mitad de ese siglo, hasta inicios del XIX. Entre los artistas incluidos figuran Thomas Gainsborough, Joshua Reynolds, George Romney y Godfrey Kneller.
Abierta al público hasta el 30 de abril venidero, la mayoría de las obras que conforman la muestra están realizadas en la técnica de óleo sobre tela, aunque también aparecen el grabado y el pastel.
Deje un comentario