“¿Qué tiene Rufo Caballero que logra convocar a gente tan diversa?” Julio García Espinosa.

El sábado primero de octubre se le celebró a Rufo Caballero su cumpleaños cincuenta en su ciudad natal, Cárdenas. En la Asociación Cubana de Artesanos Artistas (ACAA), que prestó amablemente sus locales, se desarrolló este emotivo homenaje de sus coterráneos. La oportunidad sirvió para presentar el libro La caricia del látigo. Rufo Caballero: un ídolo imposible, compilación a cargo del crítico de arte y promotor de cine Rubens Riol Hernández. 

El volumen, recién publicado por Ediciones ICAIC, cuenta con un prólogo de la autoría del narrador Francisco López Sacha, y reúne una serie de textos de diversos autores cubanos sobre la obra y la figura de Rufo Caballero. En “Cercanía de Rufo Caballero”, nos dice Sacha: “Me resulta difícil aceptar que Rufo Caballero ya no esté entre nosotros, y me resulta más doloroso aún recordarlo así, en la pequeña sala de mi casa, sentado en un balance, sonriente, dispuesto a la polémica y al diálogo. Ahora descubro otro motivo para la añoranza ante este retrato vivo realizado por su colega y discípulo Rubens Riol, que lo acerca hasta lo imaginable y lo hace translúcido a través de la aguda visión de los demás”. El prologuista continúa con una semblanza propia de Caballero y comenta las esencias de las zonas o apartados en que el compilador agrupó los textos. 

A su vez, Rubens Riol, en su nota de compilador, ofrece la mirada del ex alumno y del colega, y lo pondera como un extraordinario profesor, además de situar algunas críticas, pero siempre desde el respeto, el cariño y la admiración. Dice Riol Hernández: “Este libro ha sido concebido como una valoración múltiple. Se trata, pues, de una compilación de textos de otros autores a propósito de la obra de Rufo Caballero, para la cual hice una cuidadosa selección de los mejores acercamientos, tanto a su obra literaria como a su desempeño en los medios audiovisuales; información que aparecía diseminada en muy diversas publicaciones que vieran la luz durante los últimos veinte años”. En este sentido, no se advierte en el libro un aura hagiográfica, sino todo lo contrario, una reflexión coral acerca del desaparecido y reconocido intelectual. El mérito de Riol Hernández, además de la idea original, asumida con entusiasmo por Ediciones ICAIC, es la de haber buscado, equilibradamente, un conjunto de miradas que configuran, objetiva y críticamente, sin la ausencia de discrepancias, como hubiese sido del gusto de Rufo, su accionar en el panorama cultural del país. 

Del libro emerge una poderosa imagen del agudo crítico, del profesor querido, del promotor incansable de las artes visuales y el cine, del estudioso profundo de la cultura cubana, del pensador erudito y del crítico respetado por el gremio, todas facetas en las que descolló la corta pero fecunda existencia de Rufo Caballero. Multipremiado (dentro y fuera de Cuba), polémico, omnipresente en las revistas culturales, rostro de permanente presencia en la televisión, organizador de espacios de concertación de ideas y prolífero autor de excelentes libros, Rufo fue un intelectual que exhibió cotidianamente brillantez, inteligencia y gran poder de comunicación. 

Autores como Julio García Espinosa, Alberto Garrandés, Rafael Henández, Mario Masvidal, Abel Sierra, Gina Picart, Juan Antonio García Borrero, Duanel Díaz, Frank Padrón y Arturo Sotto, así como los ex discípulos Píter Ortega, Hamlet Fernández, Suset Sánchez y el propio Rubens Riol, nos dibujan una imagen poliédrica del querido Rufo, un hombre que se movió en diferentes dimensiones de la cultura y el pensamiento dentro de los estudios culturales de las artes visuales, el cine y también en las ciencias sociales.

El interesante volumen posee también información gráfica de momentos importantes de la vida del homenajeado, una Cronología y una Bibliografía (activa y pasiva). Algo enigmática resulta la imagen de cubierta, lo que no demerita para nada el aporte de Ediciones ICAIC. Sinceramente no creo que se haya podido concebir un homenaje más completo para celebrar en Cárdenas el cumpleaños de este autor. La presentación estuvo a cargo de quien esto escribe. El libro tendrá otras presentaciones en el venidero Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano y en la Feria del Libro de 2017, lo que no deja de ser una buena noticia para los lectores.

Allí, en su ciudad natal, ex profesores de Rufo, su madre, Nidia Mora, artesanos, artistas y amigos, demostraron que Rufo es una presencia viva en nuestro panorama cultural, que no se trataba de homenajearlo en la fecha en que cumpliría sus cincuenta, sino en la fecha en que los cumplió. Ya se organizan en Cárdenas otras celebraciones en los próximos meses.