En la mañana de hoy, 1ro de agosto, falleció en Matanzas, Hector Correa, más que artista, un hombre con los pies en la tierra. Literalmente, un artista y artesano de la cerámica que supo hacer de su vida un proyecto artístico de desarrollo basado en la ecología, pionero en su tipo en nuestro país.
Las vasijas y esculturas realizadas en su finca" Coincidencias", ubicada en Jovellanos, Matanzas; fueron merecedoras de innumerables premios y su labor ha sido reconocida tanto nacional como internacionalmente. Su proyecto ha contribuido y contribuye a la formación e integración de las nuevas generaciones, enfocados en un estilo de trabajo que prioriza el valor del recurso natural y ecológico.
Con Héctor Correa aprendimos que la tierra tiene mucho que darnos y enseñarnos. Que la historia de la cultura mundial tiene mucho que enseñarnos. De ingeniero agrónomo, a artesano y artista, a actor económico fundamental en su terruño, fue constancia de que se puede hacer una cultura y producción sostenibles.
Su amplísimo conocimiento del arte, las tecnologías y la naturaleza, es un saber que le debemos aprehender y sentir en la venas, tal como hizo él a lo largo de su vida, con la sencillez y el carisma que le definían, con el disfrute de compartir saberes y éxitos, con el asombro constante por la maravilla de la vida natural con que sabía contagiarnos a todos.
Que le acompañe nuestro amor y agradecimiento infinito allá donde vaya.
Desde el CNAP le hacemos llegar a familiares, colegas y amigos cercanos nuestras más sentidas condolencias
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