El músico Pancho Amat celebra su cumpleaños 70, recibió una felicitación del Presidente de Cuba Miguel Díaz-Canel. Haciendo un recuento de la vida de Panchito, quiero recopilar las tertulias sabrosas que hemos hecho en algunos de sus viajes por las ciudades y presentaciones diversas. Recuerdo esta de 1991, cuando visitamos Camagüey, con el grupo de Adalberto y su Son.

-¿Pancho, hablemos de tus inicios?

- Hay que echar años para atrás, nací en Güira de Melena, zona muy agrícola de buenos plátanos, de congas y rumbas de negros. Mi padre era un vendedor de sacos de carbón. Siempre tuve inclinaciones musicales, escuchaba congas de barrio que me fascinaban. Yo tengo un negro africano en mi alma. Mi padre, que capta muy temprano mi vocación musical, en una ocasión, recibe en pago por un saco de carbón, un viejo tres. Fue el mejor regalo que me hacen en mi vida, me abrió el camino a la música, mi verdadera salvación. Para más suerte, al fondo de mi casa vivía un tresero llamado Herminio Pérez y esa fue mi primera orientación. Poco apoco voy encontrando otros maestros como un tal Lucumí, de origen pinareño y organizador de grupitos soneros. Como nací en 1950, ya en mí adolescencia sobre 1957 llega a Cuba no el rock, sino el rock and roll de Bill Haley y sus Cometas, de Elvis Presley. Entonces todos tocábamos rock and roll, pero muy sonado, muy guajiro.

-¿Tu vida cambia al venir a estudiar al Pedagógico Enrique José Varona, en Ciudad Libertad, en La Habana, en la década de finales de 1960.

-Estando en el Pedagógico, conocimos de la Nueva Trova, de los contactos con la Nueva Canción Latinoamericana, en especial la música de los Andes,  de Chile, de los grupos Quilapayún, Inti Illiamni, de los hijos de Violeta Parra, Víctor Jara, Vienen a Cuba músicos y grupos chilenos en la etapa del gobierno de Salvador Allende, inicios de la década de 1970. En 1970 vino a Cuba el grupo chileno Kilapayún. El Comandante Fidel Castro preguntó cómo se podía concebir un grupo de ese tipo en Cuba. Los Kilapayún aceptaron ofrecerles clases en Chile, a seis músicos jóvenes seleccionados por Rafael Somavilla. Se mantuvieron estudiando unos siete meses. El director del grupo era Pancho Amat, también reclutaron a Jorge Campos y Andrés Pedroso Chávez entre otros. En Chile le pusieron el nombre de Manguaré. Tuvieron contacto con Isabel parra, Víctor Jara y otros Trabajaron el folklore latinoamericano, especialmente del sur, como el Kilapayún Inti-Illimani, Isabel Parra, Víctor Jara. Con instrumentos como el charango interpretaron cuecas, chacarelas, vidalas, haynos, sanjuanitos. En 1979 integran el piano y el sintetizador. El primer cantante fue Santiago Waldo García y Víctor Alfonso García.

-¿Entonces sigamos por los caminos del grupo Manguaré?

-Manguaré, data de 1971, en 1979 integran el piano y el sintetizador. El primer cantante fue Santiago Waldo García y Víctor Alfonso García. Tiempo después sobre 1980, se integra Lázaro Miguel hijo de Adriano Rodríguez. Otros directores de Manguaré: Fumanchú y Andrés Pedroso. También hicieron música nacional y canciones de compromiso social como las escritas por Andrés Pedroso. Llegaron a visitar Europa, América Latina y los Estados Unidos.

-Después de Manguaré viene una experiencia con Adalberto Álvarez?

-Me integro en 1995 al grupo de Adalberto y su Son hasta 1995 en que organizo mi propio grupo sonero. Con Adalberto alternamos con músicos de alto calibre como Ry Cooder, Cesaria Évora, Oscar D´Leon, Mongo Santamaría, Giovanni Hidalgo, Andy Montañez, Alfredo de la Fe, Dave Valentín.

-¿Hiciste una investigación  sobre el instrumento del tres?

-Estudié a Isaac Oviedo, clásico del tres; El Niño Rivera, Arsenio Rodríguez, Nené Manfugás, Chito Latamblé y muchos otros. Es un instrumento muy vinculado a lo cubano autóctono. El tres es consustancial al son.

-¿Desde el primer momento te vinculas al Movimiento de la Nueva Trova?

-Fundo el Movimiento de la Nueva Trova, fui parte de la directiva con un importante cargo. Siempre estuve vinculado a los trovadores tradicionales: Sindo Garay, Manuel Corona, Carlos Puebla, María Teresa Vera. Participo en la grabación del primer disco de Silvio Rodríguez Días y flores.

-¿Has compuesto música para otros medios?

-Para un documental de Lisette Vila y Roberto chile y he sido productor discográfico, arreglista. He compuesto par los cantantes Rojitas, en su estancia en el grupo de Adalberto. Compuse para Isaac Delgado, La Sonora Ponceña, de Puerto Rico y mucha música para mi propio grupo sonero El Cabildo del son. Por mi cuenta, también he sido Invitado de Leo Brouwer en festivales de la guitarra y, estoy abierto a todas las proposiciones. Soy un músico para todos los terrenos.