IRENO GARCÍA DICE ADIÓS


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IRENO GARCÍA DICE ADIÓS

El trovador y dibujante habanero Ireno García falleció a los 69 años, este pasado lunes 28 de agosto, había nacido en La Habana el 24 de septiembre de 1954.

Lo recuerdo en sus inicios porque comenzamos en la música en la misma fecha, en 1978. En esa fecha se celebraba el XI Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes en La Habana.

En ese festival tan sonado, Ireno fue quien escribió la letra del himno de ese evento de la juventud. “En busca de una flor”, la música fue del trovador Mike Porcel y la grabación corrió a cargo de Argelia Fragoso.

Sus canciones comienzan a ser muy bien aceptadas, por su poesía musical. Se integra entonces al  Movimiento de la Nueva Trova, iniciado en 1972.

En el grupo de la segunda hornada trovadoresca se une a Vicente y Santiaguito Feliú, Carlos Varela, Gerardo Alfonso, Xiomara Laugart, Marta Campos, Polito Ibáñez, Anabel López, entre muchos más.

Ya, en la década de 1980, en un programa  que promovía a jóvenes compositores, el cantor Silvio Rodríguez le defiende su composición con una exquisita lírica: “Canción para recordar a María”, la cual lo vuelve a llevar a la difusión de su música.

Pero una de sus canciones que más se difundió fue la que utilizaron en la despedida del programa de Eusebio Leal “Andar La Habana”, que se combinó con la de Gerardo Alfonso “Sábanas blancas”.

Ya para entonces compartía escenario en las muchas actividades que se generaron en la Casa del Joven Creador y en diversos espacios juveniles.

En los últimos años el trovador desarrolló un trabajo con su esposa, la actriz Coralita Veloz; entre canciones y canciones, Coralita iba diciendo poemas. Se mantuvieron juntos una buena etapa en la que iban de salón en salón, de peña en peña haciendo un trabajo, defendiendo la poesía y la canción.

La obra de Ireno la catalogaron como Un juglar que sostuvo una obra muy sólida y creíble, con un poder de convicción y un repertorio sólido con canciones profundamente hermosas, en las que se deslizan historias de gran hondura humana como “Querencias”, “Peticiones”, “Lejanía”, “A la deriva”, “La rueda de la suerte”, “Fábula de mayo”, “La fuente”, “Ahora”, “María Fernanda”, “Baladas de fin de marzo” y el popular “Andar La Habana”.

En el año 1998 grabó el fonograma Ireno García canta a Eliseo Diego, con musicalizaciones de poemas del destacado integrante del grupo literario Orígenes. Grabó dos discos con canciones propias: Ireno García (2004) e Ireno García, Coralean 2007.

En una etapa a Ireno lo podíamos encontrar en el Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau fue uno de los refugios más entrañables para este trovador, que le permitió presentarse en espacios como “A guitarra limpia” y grabar discos llenos de canciones memorables, conjuntamente con las descargas, junto a la actriz Coralia Veloz.

Ireno era una persona nada agresiva, amistoso, aunque llevaba una vida bastante recogida. No poseía gran voz, más bien hacía como un recitativo con su voz queda y vehemente llena de sensibilidad. Me contaba que leía mucho la poesía de César Vallejo, Pablo Neruda y Mario Benedetti.

Ireno fue miembro de la Uneac y por sus méritos recibió la Distinción Por la Cultura Nacional, la Medalla Alejo Carpentier y la Moneda 50 Aniversario de la Fundación de la Nueva Trova.

En busca de una nueva flor

(Mike Porcel - Ireno García)

Si tu sed, rompiendo las distancias,

se confunde, andando, con mi sed,

y tu aliento se alza, hasta tocar el Sol,

en busca de una nueva flor;

y si tu pecho vela mi descanso,

y mi andar desata tu canción,

y tu lucha se abriga en mi corazón

en una sola voz...

tendremos sueños que tejerle al mar,

la mansa estrella de la libertad

y aquella flor

que hay que encontrar, más allá,

donde el verso será la paz que crece.

Si tus manos vuelan con mis manos,

como mil gaviotas que, al volar,

se reparten viento, sol, amor y pan,

seremos mil gaviotas más

que vuelan sobre el mar.

(1978)


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