Un nuevo desafío enfrenta la Enseñanza Artística en Cuba ante el inicio del nuevo curso escolar con características diversas por la COVID 19. Un comienzo que se hace extensivo a en las escuelas de la ciudad de La Habana y, que comprende la escuela elemental de música Alejandro García Caturla, la escuela elemental de Arte Paulita Concepción, la escuela elemental de Danza de L y 19, el conservatorio Guillermo Tomás, las escuelas de Arte Nacionales, la escuela Nacional de Música, la Escuela Nacional de Teatro, la escuela Nacional de Artes Visuales San Alejandro, la escuela Nacional de Danza, la Escuela Nacional de Circo y la Escuela Nacional de Ballet Fernando Alonso. Además, se suman a esta intención los Grupos Docentes, como el Amadeo Roldán entre otros centros que laboran en la misión de enseñar el arte en Cuba y formar artistas que hagan valer muestras tradiciones culturales que nos identifican como nación.

El inicio de esta experiencia tuvo lugar en la Escuela Nacional de Música donde, maestros y estudiantes ofrecieron un concierto para recibir por todo lo alto la oportunidad de dar continuidad a los estudios.

Entre los protagonistas de la actividad estuvieron el maestro Enríque Lazaga, Emilio Morales, Janio Abreu quienes junto a sus estudiantes hicieron gala de ese binomio esencia de la Enseñanza Artística que es la enseñanza tutorial, el vínculo directo entre maestro y alumno, algo que distingue este espacio formador de artista. A esta experiencia, que recibimos con agrado pero con gran responsabilidad se suman las escuelas de Arte de las provincias de Ciego de Ávila y Santi Espíritus, con la misma dinámica que a través del Centro Nacional de Escuelas de Arte, centro rector de la Enseñanza Artística en el país, se ha instrumentado y se hace extensiva a las escuelas provinciales a través de las escuelas nacionales de arte, centros rectores de todas las escuelas a lo largo del país. De esta manera directores, maestros, docentes, consejos asesores y especialistas de la Enseñanza Artística se han estado preparando, durante esta etapa de receso para instrumentar las adaptaciones curriculares necesarias para ajustar el nuevo curso de manera tal que los estudiantes den continuidad a sus estudios y preparación con la menor variación posible y sin desestimar el estímulo necesario para estudiar arte en Cuba.

Según Marisol Menéndez, Jefa del Departamento de Formación escolar del Centro Nacional de Escuelas de Arte, este curso escolar, a pesar de tener la particularidad de ser más corto, está diseñado para que se cumplan los objetivos propuestos para cada grado año y especialidad, lo cual se ha logrado con el trabajo constante de un grupo de metodólogos del CNEART y maestros de las diversas escuelas quienes, han debatido y expuesto sus ideas en un seminario en el Centro Nacional de Escuelas de Arte donde han participado maestros, Jefes de Departamento de escolaridad y especialidad y directores de las escuelas de Arte implicadas en el proceso. Además, se han realizado Talleres que han incluido temas como: La organización escolar, los ajustes curriculares en cada año y especialidad, salud escolar, los ajustes curriculares en cada grado y especialidades, salud escolar superación y trabajo metodológico entre otros. Conjuntamente con estas especificidades se han tenido en cuenta el cumplimiento de las medidas higiénico sanitarias que impone la COVID 19.

Paralelo a este inicio se desarrollan nuevas estrategias para comunicar nuestros procesos y hacerlos visibles desde el CNEART, una labor que se hace extensiva a lo largo de todas las escuelas con el objetivo de trazar una ruta para que cada vez más sea la Enseñanza Artística, un eslabón fundamental para el desarrollo de la Sociedad cubana. Un nuevo curso en la Enseñanza Artística y nuevas esperanzas de que juntos, desde la enseñanza de las artes podemos avanzar.