Una de las agencias que representa a los artistas de la radio y la televisión con mayor compromiso y profesionalidad es la Agencia Artística de las Artes Escénicas “ACTUAR”, perteneciente al Consejo Nacional de las Artes Escénicas (CNAE).

Entre las diversas propuestas que descuellan en ACTUAR aparecen las Jornadas ACTUAR, evento que tiene lugar cada dos años y se realiza para promover en su público interno —actores y actrices del catálogo— cuestiones artísticas, así como debatir conceptos sobre el trabajo de los medios. Al respecto refirió su director Jorge Luis Frías Armenteros: “Las Jornadas van para su 14 edición. Desde 2010 hemos aprovechado este espacio para teorizar y homenajear. Contamos además con el Premio ACTUAR por la Obra de la Vida, a fin de estimular la labor de los artistas”.

Desde hace ya unos meses comenzaron las nuevas Jornadas, cuyo epicentro temático fue la Televisión Cubana, y como vocero el programa Al mediodía del canal Cubavisión. Destacaron los seis meses de faenas ininterrumpidas en comunidades, barrios, hogares sin amparo familiar y asilos de ancianos. Tuvo cabida además la visita al Palacio Central de Pioneros por los actores de la telenovela En fin, el mar, quienes recorrieron los círculos de interés y compartieron criterios con alumnos, profesores, mas miembros de la dirección del Palacio. Tampoco faltaron las fotos, sonrisas y aplausos, junto a las actividades teatrales y danzarias.

Para comparar las Jornadas pasadas con la reciente, agregaría Frías Armenteros: “Hemos ganado en madurez, organización y conceptualización. El guión lo preparamos con suficiente tiempo, lo aprueba y asesora el Consejo Técnico Asesor. También hemos ganado en calidad: pasamos de la terraza de la Agencia al Centro de Prensa Internacional. Más tarde, al Multicine Infanta, y ahora las hacemos en el Salón 1930 del Hotel Nacional de Cuba”.

El pasado 30 de junio este emblemático hotel habanero marcó el cierre de las Jornadas ACTUAR, en donde su director pronunció las palabras de bienvenida. Como parte del programa científico se proyectó el documental Carmen o la eterna sonrisa, realizado por Tessa Hernández Pascual, en el que se homenajea a la actriz y directora Carmen Solar tras un recorrido por sus orígenes en los medios, así como su quehacer cotidiano actual.

Oportuno se presentó también el debate sobre la racialidad en las producciones dramatizadas de la Televisión, a cargo de los directores Magda González Grau y Charlie Medina. Actores y actrices protagonizaron un debate, cuyo punto neurálgico fue la incapacidad de aprobar una cifra significativa de actores negros en los castings. De igual modo, la falta de personajes que ubiquen al negro más allá de los personajes negativos.

A continuación, se presentó el proyecto de libro La felicidad de ACTUAR por el Licenciado Jesús Arencibia Lorenzo, profesor de Periodismo en la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana. Dayron Soto, junto a otros colegas periodistas, leyeron entrevistas publicadas en el libro. En el ejemplar se escucharon las voces de grandes personalidades de la cultura cubana como: Verónica Lynn, Rosita Fornés, Aurora Basnuevo, Mario Limonta y Frank González. Este texto cobra aún más relevancia, pues contiene los testimonios de los ya desaparecidos actores Gladys Zurbano, José Corrales y Glice Fariñas.

El plato fuerte del día aconteció tras el reconocimiento a los actores jóvenes (alrededor de 50), con una ya marcada trayectoria dentro de la programación dramatizada de la Televisión.

Actores consagrados fueron galardonados con el Premio ACTUAR por la Obra de la Vida, entre ellos: Félix Pérez, Obelia Blanco, Samuel Claxton y Diana Rosa Suárez; también, post morten, Glice Fariñas, Rolando Núñez y Rogelio Blaín. El lauro consistió en una estatuilla hecha de cerámica que representa un rostro cubierto con una máscara y un gesto de actuación mediante las manos que parecieran apuntar al escenario.

De la pieza diría su creador el artesano Carlos Alberto Reyes Hidalgo: “Yo ya hace algunos años hacía máscaras que tienen que ver con el origen de la actuación, pensando en el teatro griego; y las manos, porque comunican mediante los gestos. A cada pie de la pieza se le incorpora una inscripción que distingue su cualidad de premio por la Obra de la Vida”.

Como colofón apareció en escena el grupo vocal Ancora, caracterizado por voces potentes y la afinación de sus integrantes, quienes defendieron con sus timbres el género lírico y la canción cubana.

El pasado 1º de julio se cumplió el aniversario 39 de la Agencia, un motivo más para celebrar la felicidad de ACTUAR.