El número 55 aniversario de La Gaceta de Cuba, correspondiente a los meses marzo y abril del 2017, fue presentado ayer en la sala Martínez Villena de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba.

Norberto Codina, director de la revista, explicó que Yosvany Montano, profesor de Estudios Cubanos del Instituto Superior de Arte presentaría este número ya que el mismo tiene como eje central un espectro de lecturas de distintas generaciones acerca de la publicación en sus 55 años, que se cumplieron el 15 de abril.

El joven profesor dio lectura a un texto en el que valoró el papel de la revista durante estos 55 años en el panorama nacional de las publicaciones seriadas culturales, la influencia que ha ejercido en él como lector y reflexionó sobre el contexto de la cultura contemporánea universal y las amenazas de que es objeto y donde “lo entretenido, lo light, lo simplificador, trascienden como atributos de la cultura de masas; la colonización de la información, la reproducción de un lenguaje subyugante y manipulador se revelan como efectos inmediatos. Enajenación y asimilación acrítica posibilitan el triunfo del pragmatismo”, dijo el presentador.

En cuanto a la realidad cubana expresó que en no pocas ocasiones se observa “una distrofia en el pensar; nuestras llegadas tarde a las polémicas, nuestros silencios peligrosos, la afectada credibilidad de la información oficial en su competencia con la especulación terminan muchas veces posicionando como verdad un argumento mutilado de manera intencional que se expande aceleradamente; la prensa y en particular la prensa cultural, adquiere entonces significaciones especiales”.

Montano se excusó por no referirse a los trabajos aparecidos en esta nueva entrega pero sí declaró que La Gaceta de Cuba “es una experiencia para dialogar con Cuba, con sus circunstancias” y que “ofrece abarcadoras dimensiones para un análisis, para un intercambio con respecto a sus desafíos y desde ellos para una valoración del impacto real en el tejido espiritual de la nación”.

Seguidamente advirtió de la necesidad de que la publicación regrese a las aulas universitarias de todas las carreras, no solo al ISA y a la Facultad de Artes y Letras, y resaltó el propósito de la misma de “mostrar caminos, apoyar las posiciones discordantes y fomentar los criterios arriesgados; el clima cultural en el que emerge cristalizó para La Gaceta de Cuba algo así como un embrionario signo de pluralidad revolucionaria que la sigue acompañando hasta hoy“.

Para finalizar Montano manifestó: “Festejamos hoy un proyecto en expansión que suma más de medio siglo, un viaje hacia el entendimiento de lo cubano a través de la palabra de los creadores; un esfuerzo atinado por combatir esa ignorancia invisible que asecha. Festejamos al decir del poeta el compromiso por empujar un país”.

Este número de cumpleaños inicia con un texto ineludible de la doctora Graziella Pogolotti titulado Manifiesto en favor de la desmesura para conjurar el miedo a consignas de moda, y presenta el dossier  Lecturas de la Gaceta de Cuba con artículos de Fernando Martínez Heredia, Juan Antonio García Borrero, Mirta Yáñez, Zaida Capote, Maggie Mateo, Pedro de Oraá, Luciano Castillo, Joaquín Borges Triana, Abel González Melo, hasta completar treinta  miradas de especializaciones y generaciones diferentes.

Se incluye en este número la poesía de Luis Llorente, textos de David Mateo, Pedro Juan Gutiérrez, Félix Julio Alfonso López y un trabajo evocador del admirado y popular Pacho Alonso, de la autoría de Emir García Meralla.

En cuanto a las páginas dedicadas a la crítica hay una gran presencia de la literatura con la firma de Daniel Céspedes, Mónica Gómez, Margarita Lozano y Nelson Herrera Isla, quien revisa el volumen Soy de aquí, las memorias de la profesora Adelaida de Juan; cierra este bloque una valoración de Carlos Gómez sobre la muestra personal Relatos insolentes. Historia mansa, del artista Henry Eric, exhibida en la Galería Taller Gorría de la Habana Vieja.

Para este año la revista ha creado la sección 55 años en la que publicará textos clave aparecidos en sus páginas en las primeras ediciones; en esta ocasión tocó el turno a un trabajo de Juan Blanco acerca de la música de vanguardia en la Isla que salió a la luz en el número fundacional de La Gaceta de Cuba el 15 de abril de 1962.