La Plaza 

Si se toma como punto de partida para la aproximación a la Plaza Cívica José Martí de Marianao el principio de palimpsesto que reina en la ciudad, entonces no habrá otro modo de comprenderla que tratando de entender cada una de las capas que la integran, y eso solo es posible mediante la lectura e interpretación de los documentos que en los diferentes tiempos históricos se vinculan a ella. Datar la Plaza Cívica de Marianao en 1955 y ubicar su construcción como expresión de la política del Alcalde Francisco Orúe González entre 1948 y 1958, simplifica un proceso cultural de encomiable valía para la historia del patrimonio cultural cubano, como muestra de la conformación de la identidad de los marianenses.

Para el tema que se aborda, el cierre de la década del 40 fue de suma importancia para todos los cubanos y en particular para Marianao. Desde una perspectiva histórica y en el ámbito del patrimonio cultural, se hizo público el otorgamiento de la categoría de Monumento Nacional a la Casa Natal de José Martí en la ciudad de La Habana. Información que circuló en la primera página de El Sol, en la edición correspondiente al 29 de enero de 1949, complementándose con el siguiente subtítulo: “A propuesta del Ministro de Educación Dr. Sánchez Arango, así lo acordó el Consejo de Ministros”. (1) Con antelación a la firma del Decreto no. 602 del 5 de febrero de 1949 y su publicación en la Gaceta Oficial el 7 de marzo, el reconocimiento de los valores de la modesta casa situada en Paula no. 41 en 1853, luego Leonor Pérez no. 314, era un hecho.

La declaratoria de Monumento Nacional a la Casa Natal no solo otorgó legitimidad a sus innegables valores, sino también al sentir patriótico de los cubanos por el Maestro. En 1901 la casa fue adquirida por la Asociación de Señoras y Caballeros “Por Martí” y entregada en usufructo a la madre del Apóstol hasta que a la muerte de esta se destinó a Museo, Biblioteca y Galería Iconográfica en 1923, al cuidado del Secretario de Instrucción Pública y Bellas Artes. 

En relación con la Parada Escolar que sirve de guía a este trabajo resulta importante la celebración del 99 aniversario en 1952, año en el que el centro de atención fue el cincuentenario de la República. El tradicional desfile se redujo a la concentración de una representación de las escuelas públicas en la Biblioteca Municipal, ubicada en la actual calle 47 esquina a 120, para desde allí, “acompañados con el Alcalde Orúe hasta el monumento del Apóstol, depositar en él la ofrenda floral de la Administración Municipal”. (2)    

En 1953 la Junta de Educación y la Dirección de Cultura Municipal, declararon una semana de actividades con un extenso programa que tenía por centro la colocación de la Antorcha Martiana al lado del busto a Martí emplazado en las calles Paseo y Martí (calle 124 y 49), llama que debería permanecer encendida durante todo el año del centenario. Ello conllevó a que el programa definiera dos jornadas; la primera, con núcleo a las 9:30 a.m. cuando las Escuelas Primarias Superiores ofrecerían una ofrenda floral ante el busto y se entonarían las notas del Himno Nacional y el Himno de la Bandera Cubana y; la segunda, con dos acciones: la concentración de los estudiantes en la explanada frente al Ayuntamiento para su traslado al merendero municipal ubicado en La Coronela a las 3:00 de la tarde y el acto central junto al Monumento a las 6:00 para inaugurar la Antorcha. En la imagen de la ciudad, particular impacto debió tener la colocación de litografías de Martí en casas, instituciones y establecimientos comerciales.

Pero la concepción urbano-arquitectónica de la actual Plaza Cívica José Martí de Marianao podría ubicarse entre finales de 1953 e inicios de 1954. El martes 12 de enero de 1954 Francisco Orúe presentó el proyecto al Club Rotario con el objetivo de someterlo a una franca disertación. Y no podía ser de otro modo, en tanto se trataba de una obra que daba continuidad a los reclamos de un busto ante el cual rendir tributo desde 1936; el mismo que, desde su primer emplazamiento en la entonces Avenida 4 de Septiembre, hasta el presente, hizo realidad ese anhelo.

La descripción de aquel proyecto (3) no solo indica las intervenciones que han de hacerse en aras de modernizar el espacio, sino que además corroboran los detalles del paisaje urbano existente anterior a la rehabilitación, hecho que dota a este texto de un encomiable valor histórico documental. Entre las acciones que se habrían de acometer se hace referencia a la eliminación del paseo central “pues será construida una sola, pero muy amplia calle con zonas de parqueo, espaciosas aceras y arbolados laterales, extendiéndose la misma hasta la intercepción con las calles Campa e Infanta [actual 43 por la izquierda y derecha respectivamente], donde será emplazado, convenientemente el busto del Apóstol”.

Desde esas perspectivas se ha de entender, en primer lugar, que hasta 1954 la calle 124 mantuvo en su centro un paseo peatonal a la usanza del existente en la cercana calle nro. 118; de ahí la especificación en la descripción de los desfiles entre 1946 y 1953, en la que los alumnos tomarían por la senda derecha hasta depositar la ofrenda floral ante el busto para luego nuevamente por la derecha recorrer la calle Martí hasta el Ayuntamiento. En la elección del sitio de emplazamiento del busto debieron influir entonces dos factores: la jerarquía de la calle del Paseo y su intercepción con el eje en que por primera vez rindieron homenaje al Héroe en un espacio público de la ciudad de Marianao, la calle Martí.

En segundo, a partir de entonces el espacio a recorrer entre la calle Real o avenida 51 y el Monumento, ganarían en prestancia al ampliar las visuales de una a tres cuadras, elemento que, por otro lado, encuentra fundamento en la modernización de la calle Maceo, hoy avenida 45, como eje destinado a “descongestionar en mucho el tránsito de la Calzada Real de la ciudad”. (4)

Se ha de destacar en la presentación de Orúe el llamado hecho al autor de la obra para el estudio del nuevo emplazamiento de la pieza escultórica, tomando como punto de partida la condición de cierre de perspectiva que habría de otorgar el monumento a la plaza. Subraya la monumentalidad del proyecto, el interés de colocar a continuación “otros bustos de patricios y de figuras sobresalientes de la ciudad que merezcan ser perpetuados en la moderna Plaza”.

Como cierre Orúe comunica la relación entre la obra y los proyectos urbanísticos del Gobierno Central de la República. Si al municipio le corresponde modernizar el paseo hasta la calle Santa Rosa (hoy avenida 35), pertenece al Gobierno Central su continuidad “hasta entroncar con la de Franklin D. Roosevelt, que terminará en la Playa de Marianao”, relaciones de poder que de algún modo repercuten en la reducción de las iniciativas locales para rendir homenaje a Martí.

En este sentido basta referir que el programa de la jornada correspondiente a 1954 fue organizado por Blanca Urquiza Magaz, secretaria por sustitución reglamentaria de la Junta de Educación de Marianao, quien “cumpliendo disposiciones del Ministerio de Educación” envía una circular a todos los directores y maestros de las distintas escuelas del Término con la programación oficial para estas fiestas.

¿Esperarían los marianenses el próximo 28 de enero para dejar inaugurada su plaza? El 30 de julio de 1955 se hace público que “Inaugurarán en agosto la Plaza Cívica «José Martí» ya construida” y, a modo de subtítulo, se apunta: “Será invitado especialmente el Presidente de la República General Fulgencio Batista y Zaldívar y demás autoridades oficiales; así como la Prensa y las Instituciones Cívicas, Gran participación de la Clase Veteranista. Detalles”. (5)

En efecto, la Plaza Cívica de Marianao se inauguró el 11 de agosto de 1955. En una tribuna levantada en la Calle Progreso y San José el capitán Manuel Camejo, el Presidente de los Veteranos de Marianao, develó el busto del Apóstol a las 5:00 de la tarde, el mismo que había sido fruto del Club Rotario del Término en 1942 y, ante una multitud de más de 20 mil personas, según el titular de El Sol, fue este el escenario en que a propuesta del Alcalde Municipal, Francisco Orúe, el ayuntamiento entregó a Fulgencio Batista y Zaldívar y a su esposa, Martha Fernández Miranda, los títulos de  “Hijos Adoptivos de Marianao”. (6)

Con la inauguración quedó atrás el esfuerzo de las instituciones de Marianao en contar con un monumento ante el cual rendir tributo a José Martí en el día de su centenario; en su lugar, y así ha quedado registrado en la historia local, la escultura de Arnold Serrú y su posterior adaptación al espacio urbano, no sobrepasa el símbolo del gobierno de Orúe, quien dedicó el primer acto público en este lugar a la celebración de los festejos de la Virgen de la Caridad, Patrona de Cuba, el 8 de septiembre de 1955.

Apunta este trabajo a la necesidad de otros estudios a la Plaza Cívica de Marianao, cuyos resultados la revelen con la riqueza cultural que en ella se atesora particularmente a partir de otros periodos históricos y un análisis de los inmuebles que espacialmente la definen.  

Notas:

(1) El Sol, 40(22):1, Marianao, 29 de enero de 1949.

(2) “La Dirección de Cultura organiza notables actos”, El Sol, 44(19):6, 12 de enero de 1952. La concepción del concurso para estudiantes de enseñanza superior en la Biblioteca tuvo por tema la concepción martiana de la República “queriendo inclinar así el pensamiento a los educandos hacia el Cincuentenario de la misma y la presencia en ella de José Martí”. Imeldo Álvarez: “En torno a Martí y la República”, El Sol, 26 de enero de 1952, p. 1.

(3) El Sol, 45(20):1, Marianao, sábado, 16 de enero de 1954.

(4) “Reconstruida por el alcalde Orúe la calle Maceo”, El Sol, 45(21):1, Marianao, 23 de enero de 1954.

(5) El Sol, 45(48):6, Marianao, sábado 30 de Julio de 1955.

(6) El Sol, 45(50):1, Marianao, sábado 13 de agosto de 1955.